
(Bloomberg) -- Estados Unidos prevé que la producción nacional de crudo disminuya el próximo año por primera vez desde 2021, lo que supone un duro golpe para el impulso del presidente Donald Trump hacia el dominio energético estadounidense.
Según las previsiones a corto plazo publicadas el martes por la Administración de Información Energética (EIA), se espera que la producción caiga a 13,37 millones de barriles diarios en 2026, frente a los 13,42 millones diarios de 2025.
La previsión de producción para el próximo año supone una caída de 120.000 barriles diarios con respecto a las previsiones anteriores de la agencia en mayo.
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Trump ha dicho que los productores de petróleo estadounidenses “perforarán, perforarán y perforarán” y declaró una emergencia energética a principios de su segundo mandato en un intento por impulsar la producción. Sin embargo, varias empresas de esquisto han advertido de que los bajos precios del petróleo afectarán a la producción, y empresas perforadoras como Diamondback Energy Inc. afirman que la producción ya ha alcanzado su punto máximo.
Con menos plataformas de perforación activas, los operadores estadounidenses perforarán y completarán menos pozos hasta 2026, según las estimaciones de la EIA. El número de plataformas de perforación de crudo en EE.UU. ya se ha desplomado hasta su nivel más bajo en unos cuatro años, mientras empresas de exploración de esquisto se preparan para el debilitamiento de la demanda mundial de petróleo.
La producción de esquisto en EE.UU. será de unos 11,09 millones de barriles diarios el próximo año, por debajo de la previsión anterior de 11,25 millones, debido a la ralentización de la prolífica cuenca del Pérmico, según la EIA.
En otra señal de la ralentización de la actividad en el sector del esquisto, los operadores ampliaron su oferta de pozos perforados previamente por cuarto mes consecutivo, lo que supone la racha más larga de expansión de pozos perforados pero sin terminar (DUC) desde los inicios del covid-19 hace cinco años, según cifras de la EIA. El recuento de DUC, que aumentó en 25 hasta alcanzar los 5.319 en mayo, tiende a subir cuando el sector del esquisto quiere esperar a que bajen los precios del petróleo y luego fracturar cuando suben.
Mientras tanto, la producción en alta mar crecerá hasta 1,85 millones de barriles diarios en 2026, unos 40.000 barriles más que la previsión del mes pasado, lo que mitigará el impacto de la reducción de la actividad en otras regiones productoras de crudo.
La demanda mundial de petróleo para este año crecerá más lentamente, según la agencia. El consumo aumentará en 800.000 barriles diarios hasta alcanzar los 103,5 millones de barriles diarios, frente a la previsión anterior de un crecimiento de la demanda de 1 millón de barriles diarios, según la EIA.
En otra señal de un exceso de oferta inminente, la EIA también prevé un aumento de las reservas de más de 800.000 barriles diarios este año. Se trata del mayor aumento desde que comenzó a publicar sus estimaciones para 2025, en enero del año pasado.
Nota Original: US Sees Oil Output Falling in 2026 in Blow to Trump’s Agenda (2)
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