Georgia apuesta por proyectos energéticos internacionales para sanear relaciones con UE

Georgia impulsa el proyecto de suministro eléctrico a la UE desde Azerbaiyán y enfatiza su papel como socio estratégico, a pesar de las tensiones políticas y normativas recientes con Bruselas

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Tiflis, 16 ene (EFE).- Georgia apuesta por proyectos energéticos internacionales para sanear las relaciones con la Unión Europea (UE), deterioradas por el supuesto acercamiento de Tiflis a Rusia, aseguró hoy a EFE el presidente del comité de Relaciones Internacionales del Parlamento, Nikoloz Samjaradze.

"La Comisión Europea continúa apoyando la ejecución del importante proyecto de suministro de electricidad de Azerbaiyán y Georgia a los países de la UE por el mar Negro, llamado a ser una fuente alternativa de energía para Europa", aseveró.

Las relaciones entre Tiflis y Bruselas se vieron afectadas por la aprobación el año pasado de varias normas legislativas consideradas prorrusas como la "Ley sobre la transparencia de la influencia extranjera" y la "Ley sobre la propaganda LGBT".

Según el legislador, "Occidente necesita estabilidad en la región de los mares Negro y Caspio, y Georgia siempre jugó y continuará jugando un papel único al respecto, en particular como parte de proyectos económicos globales".

Entre estos proyectos, que convierten a Georgia en un "atractivo" socio, citó al Corredor medio (también conocido como Ruta de Transporte Internacional del Transcaspio), que enlaza China, Asia Central y Europa.

El proyecto de suministro eléctrico por el fondo del mar Negro, que según el legislador convierte a Georgia en "un puente entre Europa y Asia", consiste en una línea eléctrica submarina con una potencia de 4.000 megavatios y una extensión de 1.195 kilómetros que le conecta con Rumanía, de donde la energía es transmitida a Hungría y otros países europeos.

La construcción de estas instalaciones, valoradas en 2.300 millones de euros, arrancará este año y requerirá de tres a cuatro años para comenzar los suministros de electricidad a Europa.

"En general, esperamos cambios de actitud respecto a Georgia tras la investidura del nuevo presidente de EEUU, Donald Trump, y confiamos en que las presiones internacionales se reduzcan tras el fin de la guerra en Ucrania", dijo.

Se mostró convencido de que la guerra en Ucrania concluirá en 2025, lo cual "abrirá las puertas a un relanzamiento de las relaciones entre Georgia y la UE".

Recordó que, cuando Occidente exigió imponer sanciones directas a Rusia, Tiflis les preguntó "cómo podrían compensar nuestras pérdidas", ante lo cual no recibió "garantía alguna".

"Rusia respondería con sanciones económicas demoledoras, que podrían convertirse en un nuevo conflicto militar semejante al de 2008", sostuvo, en alusión a la guerra por el control de la separatista Osetia del Sur.

Samjaradze aseveró, no obstante, que esta cautelosa posición del gobernante partido Sueño Georgiano respecto a Rusia no le convierte en prorruso.

"Participamos en todas las sanciones internacionales contra Rusia. Nos expresamos en contra de la política de Rusia en las votaciones de la ONU, la OSCE y el Consejo de Europa (...) Por ello, cualquier acusación al respecto en contra de Georgia es discriminatoria e ilógica", indicó.

También se refirió a las críticas de Occidente a la "Ley sobre la transparencia de la influencia extranjera", que la oposición compara con la ley de agentes extranjeros rusa, al expresar la disposición de las autoridades a "un debate sano" al respecto.

"Que nos digan concretamente qué parte de esta ley no corresponde a las normas europeas y estamos listos a trabajar en su modificación", prometió.EFE

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