Río de Janeiro, 19 nov (EFE).- El ministro de Exteriores chino, Wang Yi, se reunió en los márgenes de la cumbre del G20 que se celebra en Brasil con su homólogo indio, Subrahmanyam Jaishankar, a quien pidió "más señales positivas" tras el acuerdo entre ambos países sobre el patrullaje en la frontera compartida en el Himalaya.
"Xi Jinping y Narendra Modi se reunieron recientemente marcando el reinicio de las relaciones, pero ahora ambas partes deben implementar el importante consenso que alcanzaron y respetar los intereses fundamentales de la otra parte", señaló Wang durante la reunión, recoge la Cancillería china en un comunicado.
El diplomático agregó que China y la India deben "mejorar la confianza mutua a través del diálogo" y "manejar las diferencias apropiadamente con sinceridad e integridad" para que los lazos vuelvan a ser "estables y saludables".
"Es necesario enviar más señales positivas y hacer más cosas que favorezcan los intercambios", dijo Wang, quien pidió igualmente "avances prácticos" para reanudar los vuelos directos entre ambos países.
El jefe de la diplomacia china señaló que ambos países conmemoran el año que viene el 75º aniversario del establecimiento de relaciones diplomáticas, con lo que es necesario "planificar actividades conmemorativas" y "fomentar los intercambios y las visitas en todos los campos y niveles".
"China y la India tienen intereses comunes que superan con creces sus diferencias. Debemos trabajar juntos porque eso también favorecer la multipolaridad y el multilateralismo", dijo.
Por su parte, Jaishankar, según la Cancillería china, señaló que es "positivo" que ambas partes estén "tomando medidas para implementar el consenso" alcanzado por Xi y Modi.
"India espera reiniciar los mecanismos de diálogo pertinentes lo antes posible y mantener el impulso de mejora y desarrollo de las relaciones bilaterales. Debemos manejar adecuadamente los asuntos relevantes con una actitud más positiva y no dejar que diferencias específicas definan la relación entre los dos países", afirmó.
El acuerdo entre ambos países permitirá que la India pueda volver a llevar a cabo el patrullaje que ejercía en las zonas fronterizas entre ambas potencias asiáticas en el territorio de Ladakh, en el Himalaya, antes del choque de 2020, que supuso el peor enfrentamiento entre los países vecinas en los últimos 45 años.
No se ha detallado en qué se traducirá este acuerdo sobre las patrullas que operan en torno a la zona, un punto de fricción entre la India y China, que se disputan la hegemonía de la región indopacífica.
El despliegue de China a mediados de 2020 dio lugar a la respuesta de la India, lo que provocó un choque fronterizo en el Himalaya occidental, el peor enfrentamiento entre las dos grandes potencias asiáticas en casi medio siglo, que dejó al menos una veintena de soldados indios muertos y 76 heridos, mientras que Pekín reconoció cuatro muertos y un herido de gravedad.
Desde entonces, con un gran despliegue de tropas, la situación se ha mantenido tensa, pese a las numerosas rondas de negociaciones en los ámbitos diplomático y militar entre representantes de los dos países para rebajar la fricción y reducir el número de soldados en la región. EFE