Bagnaia busca seguir su escalada 'en casa' en el GP de San Marino

El italiano Francesco Bagnaia, ganador de los tres últimas carreras en la categoría de MotoGP, busca seguir su escalada en la clasificación y lo hará 'en casa', en el Gran Premio de San Marino, que se disputa en el circuito de Misano, situado cerca del mar Adriático, entre las localidades italianas de Rímini y Pésaro.

En la clasificación general del Mundial, antes de la carrera de este domingo, Bagnaia (Ducati) es tercero con 156 puntos, a 12 del español Aleix Espargaró (Aprilia) y a 44 del líder y defensor del título, el francés Fabio Quartararo (Yamaha), que acumula 200 puntos.

Fue en el circuito de Misano, en el Gran Premio de Emilia-Romaña de 2021, donde Quartararo se proclamó precisamente campeón mundial de la MotoGP el pasado octubre.

"Es evidentemente un gran recuerdo, pero hay que mantenerse concentrado en el campeonato de este año", dijo Quartararo al llegar a Italia.

El piloto galo es consciente de que todavía tiene un margen relativamente cómodo sobre sus perseguidores, pero también de que no debe confiarse.

Hace diez días no pudo ganar en el Gran Premio de Austria, pero su segundo puesto, solo superado por Bagnaia, le permitió aumentar su diferencia respecto a Espargaró, que fue sexto después de una caída.

Quartararo, de 23 años, sigue viendo en Espargaró un rival de peso y ha llegado incluso a calificar a Bagnaia como "el hombre a batir" en estos momentos tras sus últimas victorias.

'Pecco' Bagnaia, vigente subcampeón mundial, acumula cinco victorias esta temporada, pero sobre todo ha encadenado triunfos en las tres últimas (Países Bajos, Gran Bretaña y Austria).

Desde su victoria hace un año en el Gran Premio de Aragón, en septiembre de 2021, el piloto italiano de 25 años presenta unas estadísticas impresionantes, con nueve victorias en las últimas diecinueve carreras.

Solamente sus errores en el inicio de la temporada, con caídas en las carreras de Catar, Francia y Alemania, le impiden no estar más cerca en la clasificación o incluso por delante de Quartararo, que ha ganado tres Grandes Premios en lo que va de curso.

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"Creo que he comprendido las razones de mis errores del principio de temporada. Ahora utilizo más el cerebro", aseguró Bagnaia, que el año pasado fue el vencedor en el Gran Premio de San Marino.

Ducati confía sobre todo en él, aunque cuenta con ocho motos en la categoría (las dos oficiales de Bagnaia y Jack Miller, pero también las de los equipos satélites Pramac, VR46 y Gresini).

Formalmente no se han dado consignas formales para dejar vía libre a Bagnaia, pero sí "sugerencias" al resto de pilotos Ducati para que no perturben la escalada en la clasificación de su principal baza, según publicó la prensa italiana.

"Cualquier piloto Ducati que pueda ganar, debe hacerlo. Simplemente pedimos no intentar ataques peligrosos hacia Bagnaia, con el riesgo de caída", subrayó el director deportivo de la marca italiana, Paolo Ciabatti, preguntado recientemente al respecto por el diario La Repubblica.

El español Joan Mir, baja este fin de semana tras dañarse un tobillo en Austria, será reemplazado a los mandos de su Suzuki por Kazuki Watanabe. El piloto japonés de 31 años, especialista en competiciones de resistencia, corrió ya en las categorías inferiores del Mundial de motociclismo, pero vivirá su debut en la MotoGP.

Mir, campeón mundial en 2020, será el próximo año el compañero de su compatriota Marc Márquez en Honda, según se anunció esta semana.

Marc Márquez, operado de nuevo en su húmero derecho a principios de junio, acaba de retomar el entrenamiento sobre la moto, pero sigue de baja para las carreras del Mundial. Según varios medios podría tomar contacto con la pista de Misano la próxima semana, con motivo de dos días de ensayos previstos en el lugar.

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