Guardar
El recorrido completo del Sendero
El recorrido completo del Sendero Azul Nacional abarca 1.171 kilómetros de paisajes únicos en Hungría (foto: Wikipedia)

El National Blue Trail de Hungría se ha consolidado como el sendero de caminata más extenso de Europa, atravesando paisajes naturales, históricos y culturales que definen la esencia de este país en el corazón del continente. Aunque este país carece de cumbres elevadas o acceso al mar, ofrece a los amantes del senderismo una travesía sin igual que reúne tradición, desafío físico y la hospitalidad de las pequeñas comunidades locales.

Historia: su origen y evolución

Los orígenes de este lugar se remontan a 1938, cuando fue inaugurado oficialmente en conmemoración de los 900 años de la muerte de San Esteban. Desde entonces, el sendero ha sido parte integral de la identidad turística y cultural de Hungría. Con una longitud total de 1.171 kilómetros, el camino inicia en la cima de Írott-kő, una montaña de 884 metros situada en la frontera con Austria, y finaliza en la aldea de Hollóháza, cerca del límite con Eslovaquia, de acuerdo con los datos de la Federación Húngara de Senderismo (MTS en húngaro).

Durante su desarrollo, el sendero ha sido considerado un atractivo nacional que conecta la mayoría de los tesoros naturales e históricos de Hungría. La ruta fue creada para unificar la señalización turística, abriendo el país a visitantes de todo el mundo y fomentando el senderismo como actividad accesible durante las cuatro estaciones.

La ruta atraviesa antiguos castillos
La ruta atraviesa antiguos castillos y monumentos que evocan siglos de historia húngara (foto: Wikipedia)

El itinerario total se ha dividido en 27 secciones, lo que permite a excursionistas de todos los niveles planificar experiencias de distinta duración e intensidad. Comenzar el recorrido implica cruzar montañas, mesetas, y valles, recorriendo tanto la región noroccidental como el centro y noreste del país, y pasando por dos sitios Patrimonio Mundial de la UNESCO: el antiguo pueblo de Hollókő y la Cueva de Estalactitas de Aggtelek.

El desafío no es menor: a lo largo del itinerario, los caminantes deben enfrentar 31.000 metros de desnivel acumulado, una cifra que muestra la exigencia física del recorrido. Sin embargo, más de siete mil personas han registrado la culminación del sendero completo, lo que ha consolidado la reputación del Blue Trail entre la comunidad senderista húngara e internacional.

Las características que lo hacen único

La sección más pintoresca de la ruta se despliega en las tierras altas de Balaton, en un tramo de 45 kilómetros entre Badacsonytördemic y Nagyvázsony. El lago Balaton, el mayor de Europa Central, ofrece vistas de un azul turquesa desde los miradores de la meseta. Los senderistas atraviesan viñedos y se encuentran con colinas como Csobánc, ruinas de castillos y pequeños pueblos encantadores en la cuenca de Káli.

El lago Balaton, el mayor
El lago Balaton, el mayor de Europa Central, brinda panorámicas inolvidables a los senderistas (foto: Wikipedia)

A mitad de su camino, tras aproximadamente 500 kilómetros, la senda alcanza las colinas circundantes de Budapest, permitiendo observar la capital húngara desde lo alto antes de cruzar el famoso Danubio. Luego, la ruta se adentra en las montañas de Börzsöny, Mátra, Bükk y Zemplén, donde la vegetación, los valles y las vistas panorámicas se suceden, acompañadas por la presencia de castillos medievales y monumentos históricos de profunda relevancia.

En la sección 10, los caminantes ingresan al bosque de Vértes, caracterizado por su fauna y flora diversa, así como por la presencia de fortalezas como Csókakő, Gesztesi y Vitány. El sendero se torna más amigable, permitiendo disfrutar con calma la tranquilidad y el silencio de los extensos hayedos.

Al culminar en la pequeña Hollóháza, una estatua conmemora tanto el esfuerzo individual como la tradición senderista húngara, simbolizando el lazo entre naturaleza, historia y comunidad.

Las pequeñas aldeas rurales a
Las pequeñas aldeas rurales a lo largo del Blue Trail reflejan la hospitalidad característica del país (foto: Wikipedia)

Un desafío colectivo

Durante generaciones, la finalización del Blue Trail se ha convertido en una meta personal y colectiva para los amantes de la montaña en Hungría. Prácticamente, cada senderista local ha escuchado la pregunta: “¿Y tú, has completado el Blue Trail?”. El hito establecido para el reconocimiento formal es recopilar en un cuaderno los 150 sellos que se obtienen en igual número de puntos de control dispersos a lo largo de la ruta.

A pesar de que alcanzar todos los sellos supone un logro notable, lo más valorado por quienes completan el trayecto es la posibilidad de descubrir paisajes y tradiciones que, a menudo, pasan desapercibidas para el turismo convencional. Durante la caminata, los excursionistas pueden acampar en la naturaleza (con algunas regulaciones específicas), apreciar la hospitalidad de las aldeas y sumergirse en la rica cultura rural de Hungría.

La oferta de alojamiento es amplia a lo largo del recorrido: desde campamentos en plena naturaleza hasta hostales económicos y hoteles cómodos. Esta variedad permite adaptar el viaje a los deseos y posibilidades de cada viajero, haciendo del Blue Trail una experiencia inclusiva y dinámica.

El sendero es reconocido como
El sendero es reconocido como el más antiguo de Europa y emblema del espíritu senderista de Hungría (foto: Wikipedia)

Consejos para quienes sueñan recorrerlo

Visit Hungary señala que preparar una travesía por el National Blue Trail implica considerar tanto aspectos logísticos como de seguridad. La compra de una hoja de ruta y el cuaderno de sellos es esencial para quienes desean documentar formalmente el recorrido. Estos materiales no solo facilitan la logística, sino que colaboran en la integración del senderista a la tradición local.

Dentro de la travesía, la seguridad siempre es primordial. Hungría se destaca por su bajo índice de delincuencia y su cultura hospitalaria, factores que convierten al país en un destino atractivo para excursionistas internacionales. A lo largo del sendero, la disponibilidad de servicios y hospedaje reduce riesgos y facilita la recuperación tras cada etapa.

Otro punto importante es la adaptabilidad del sendero: se puede recorrer completo o elegir tramos específicos dependiendo del tiempo y las capacidades físicas de los caminantes. Además, la red de senderos conectados, que supera los 21.000 kilómetros marcados, permite extender la experiencia a paisajes adicionales y descubrir rincones poco transitados por el turismo tradicional.