La frase que puede arruinar una amistad

Shari Leid, autora y especialista en relaciones, explica por qué esta expresión puede ser tan perjudicial y sugiere respuestas más constructivas para manejar desacuerdos

Guardar
“Es una frase de guerra”, afirma la experta en su análisis en la prestigiosa revista norteamericana. “La gente se detiene y la nota. Es directa, y hay algo que se siente degradante en ella”.

La frase “da igual” puede parecer inofensiva, pero su uso en las interacciones cotidianas puede generar tensiones en las relaciones. Este tipo de respuestas pueden desencadenar reacciones físicas y emocionales negativas en las personas, llevándolas a sentirse despreciadas o no valoradas.

En su columna para TIME, Shari Leid -autora y especialista en relaciones- destaca la importancia de manejar mejor las emociones durante los conflictos, sugiriendo alternativas de comunicación que promuevan un diálogo más respetuoso y efectivo.

Por qué decir “da igual” resulta dañino en las relaciones

Leid, quien en su juventud consideraba la frase como una de sus favoritas —al punto de lucir una placa personalizada con esa frase en su primer auto Mazda 323 hatchback—, reconoce ahora el impacto negativo que tiene en la comunicación interpersonal.

“Es una frase de guerra”, afirma la experta en su análisis en la prestigiosa revista norteamericana. “La gente se detiene y la nota. Es directa, y hay algo que se siente degradante en ella”.

Esta expresión puede provocar sentimientos
Esta expresión puede provocar sentimientos de desinterés y tensión, socavando el valor percibido de las opiniones de los otros (Freepik)

Reacciones y consecuencias de usarla

El impacto no se limita al plano verbal. Leid describe que quienes reciben esta respuesta suelen experimentar una reacción física inmediata, como si hubieran recibido una bofetada. “La tensión aumenta y se dan cuenta de que su amigo está dispuesto a tratarlos de manera grosera y sarcástica”, señala la experta en el artículo de TIME. Esta respuesta puede provocar que la otra persona se retraiga y sienta que sus opiniones o emociones no tienen valor en la conversación.

Alternativas recomendadas para responder en situaciones de conflicto

Frente a la tentación de recurrir al “da igual” en momentos de desacuerdo, Leid propone alternativas que favorecen una comunicación más saludable. En una reciente discusión con su pareja, la experta relata que estuvo a punto de responder con esa palabra, pero optó por decir: “No puedo hablar de esto ahora mismo”.

Según Leid, frases como “necesito un momento” pueden ser útiles cuando la emoción amenaza con desbordarse y se corre el riesgo de decir algo de lo que uno podría arrepentirse.

Se ofrecen estrategias para manejar
Se ofrecen estrategias para manejar desacuerdos de manera constructiva, promoviendo una comunicación empática y cuidadosa (Imagen Ilustrativa Infobae)

El aprendizaje de responder con calma y la importancia de “respirar”

La especialista en relaciones reconoce que responder de manera calmada y considerada no siempre resulta sencillo, pero insiste en que la práctica constante mejora la capacidad de manejar situaciones difíciles. “Cuanto más practicamos esta reacción —especialmente cuando alguien nos enfrenta o dice algo que no nos gusta—, mejor nos volvemos en ello”, afirma. “Podemos volver más fuertes y sentirnos seguros de lo que decimos”.

La experta también destaca que no solo quien responde necesita un momento para calmarse; la otra persona en la conversación puede beneficiarse de un breve espacio para reflexionar. “Eso te devuelve el control”, sostiene Leid.

Ahora, en sus cincuenta años, si tuviera que elegir una nueva patente personalizada, ya no optaría por “da igual”, sino por una palabra que resume su enfoque actual: "Breathe" (“Respira”).

La información, publicada por TIME, subraya la importancia de elegir cuidadosamente las palabras en los momentos de tensión y ofrece herramientas prácticas para preservar la calidad de las relaciones personales.