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Wanda Nara volverá a estar
Wanda Nara volverá a estar al frente de Masterchef

Wanda Nara compartió con sus seguidores un momento distinto: publicó dos historias de Instagram que muestran un costado íntimo y familiar de su rutina. ¿Quién es realmente la empresaria cuando se apagan las cámaras y termina el vértigo del trabajo? Las imágenes parecen responder esa pregunta.

En la primera foto, la conductora de Masterchef Celebrity aparece recostada en un sillón oscuro, sobre una amplia alfombra gris. La luz cálida del ambiente baña la escena, realzando los gestos suaves en su rostro. Viste una musculosa blanca y joggings color gris claro. Sonríe apenas, con una expresión de calma: parece disfrutar de un respiro tras una jornada agitada de grabaciones. Entre sus brazos está su hija menor, vestida de azul oscuro. La niña se aferra tiernamente al costado de su madre, recostada y con la cabeza semioculta por un emoji en forma de corazón rosa que cubre su rostro. La confianza y la complicidad entre madre e hija se vuelven evidentes, con las manos de ambas cruzadas sobre el abdomen de Wanda. En la parte inferior de la imagen se lee la frase: “Llegar de trabajar y solo necesitar esto”, al coronar la escena con un guiño de ternura y humildad.

El segundo posteo, también capturado para historias de Instagram, muestra la cocina de Wanda en su versión más home made (hecho en casa). Sobre una mesa de mármol blanco, dispuesta con sencillez, reluce un menú que bien podría rendir homenaje a la gastronomía casera con toques gourmet.

Wanda Nara se mostró acompañada
Wanda Nara se mostró acompañada de su hija Isabella

En primer plano, una fuente ovalada exhibe tres pechugas de pollo rellenas —la piel dorada, firme, y un relleno verde asoma a través de los cortes—. El texto señala: “Pollo relleno de espinaca y queso crema”. En la parte superior de la imagen, una calabaza de intenso tono naranja sirve como recipiente para un gratinado al horno. Su piel oscura resalta el relleno cremoso y chamuscado, dándole un aspecto apetitoso, casi festivo. Sobre la foto, otra leyenda destaca: “Calabaza rellena al horno” y, en el centro, la palabra “Masterchef... -7”. El puntaje aparece en letras blancas, lo que lleva a dos especulaciones, o ella misma se considera un -7 como cocinera por el aspecto muy tostado de la tarta, o simplemente se trata de una cuenta regresiva en el marco del estreno de la nueva temporada del reality que la tendrá como conductora, el próximo 14 de octubre.

El fondo de la imagen deja ver apenas la sombra de un vaso de vidrio con líneas verticales, medio lleno, junto al menú cuidadosamente preparado. La frase final remata: home made.

Así, mientras muchos pueden ver a Wanda Nara como un personaje de la farándula, las imágenes entregan otra narrativa: la de madre, la de anfitriona, la de mujer que llega a casa, se libera de los tacos y comparte lo esencial con sus hijos y una mesa cálida.

A la espera de la
A la espera de la nueva temporada de Nasterchef, Wanda compartió sus platos

En una reciente entrevista previa al inicio de la temporada, la conductora bromeó con la casa que le quedó de su matrimonio junto a Maxi López -quien estará entre los participantes- y el régimen de visitas que obtuvo de sus hijos.

“Maxi está estudiando hasta altas horas de la noche”, agregó la animadora, dejando entrever que el exdelantero se tomó muy en serio el desafío. No se trata solo de cocinar bien o de rendir frente a un jurado exigente —integrado por Donato De Santis, Damián Betular y Germán Martitegui—, sino de atravesar el certamen con una motivación extra.

Cuando le preguntaron qué pasaría si Maxi no ganaba el certamen, Wanda no perdió el ritmo ni la sonrisa:“Si pierde, no sé qué le puedo sacar. Los chicos ya los tengo, la casa también, no le puedo sacar nada más”. La respuesta, que en otro contexto podría sonar filosa, se transformó en un gesto de naturalidad y humor. En apenas unas palabras, resumió una historia que supo tener tensiones públicas y la reconvirtió en anécdota.