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Georgina Barbarossa enemistada con Moria Casán

La llegada de Moria Casán a la pantalla de El trece con un magazine matutino, prácticamente cerrada, reavivó una de las enemistadas más largas y fuertes del espectáculo argentino. En uno de los rincones y al frente de A la Barbarossa, por Telefe, en el mismo horario que ocupará La One, está Georgina Barbarossa. La confrontación entre ambas ha atravesado distintas etapas, con episodios de tensión que se reactivan cada vez que sus caminos vuelven a cruzarse en el medio televisivo.

El origen de la disputa se sitúa en una confidencia de Barbarossa, Casán habría hecho pública sobre su esposo, Miguel “El Vasco” Lecuna, quien falleció en noviembre de 2011 durante un asalto. La conductora sostuvo en reiteradas ocasiones que la actriz y vedette habló de las adicciones de su marido, tanto en vida como después de su muerte, lo que para ella constituyó una falta imperdonable. “No la voy a perdonar jamás porque habló muy mal de mi marido. Habló mal estando vivo y también después cuando murió”, afirmó Barbarossa en su momento.

Ahora que sus caminos podrían volver a cruzarse como rivales, una cámara de Los Profesionales consultó a Barbarossa sobre la posibilidad de una reconciliación con Casán. Su respuesta fue contundente. “No, no existe, no existe. Se murió ese vínculo”, afirmó la actriz, quien además subrayó el dolor que le causó la situación: “Muchísimo”. Ante la insistencia sobre si Casán intentó comunicarse, Barbarossa reconoció que hubo intentos, pero remarcó: “Meterse con Vasco con una persona en vida y después de muerta, no, no. Eso para mí es el límite”.

La posibilidad de la competencia directa en la televisión tampoco alteró la postura de Barbarossa. Consultada sobre la llegada de Casán a El Trece en el mismo horario, la actriz destacó las cualidades profesionales de su colega: “Moria es una mujer muy inteligente, muy capaz, muy talentosa, es rápida. Me parece una gran artista”. No obstante, dejó claro que la rivalidad personal permanece intacta y que la competencia televisiva solo representa un estímulo profesional: “Me parece bárbaro que haya competencia. Eso te pone también más pilas. Igual yo siempre digo que tengo el mejor equipo de la televisión del mundo y realmente lo creo”.

A pesar del conflicto, hubo momentos en que un acercamiento podría haber sido posible. En 2017, Casán elogió públicamente la entrevista que Barbarossa realizó a su hija, Sofía Gala, pero la respuesta de la conductora fue tajante. “Vi los tuits de Moria pero no me importan. No la voy a perdonar jamás porque habló muy mal de mi marido”, reiteró Barbarossa. La tensión escaló cuando Casán la calificó de “decorado” y sugirió que desayunaba “hielo y vinagre”, mientras que Barbarossa la acusó de mentir y de buscar prensa a través de la polémica.

El distanciamiento se mantuvo durante más de tres años, hasta que en 2020 la situación volvió a cobrar notoriedad con la convocatoria de Barbarossa al programa Cantando 2020, donde Casán integraba el jurado. Ante la inminente convivencia televisiva, Casán expresó en una entrevista con Los ángeles de la mañana que no podría mirar a Barbarossa durante el certamen: “No la voy a mirar porque me descompenso, en serio. Es una señora de una vibra espantosa. La voy a escuchar pero no la voy a mirar porque me hace mal a la vista”, declaró Casán al programa conducido por Ángel De Brito.

La reacción de Barbarossa fue inmediata. Comunicó a los productores Fede Hoppe y Pablo “El Chato” Prada su decisión de renunciar al certamen. En sus redes sociales, la actriz agradeció el apoyo recibido y explicó: “Mi dignidad, mi palabra, mi moral y mi ética NO TIENEN PRECIO”, mensaje que publicó en Twitter e Instagram, arrobando a los directivos del canal.

Las redes sociales también han sido escenario de este conflicto, con mensajes cruzados y descalificaciones. Casán utilizó Twitter para referirse a Barbarossa como “decadente, traicionera y sobre todo mentirosa”, mientras que la conductora insistió en que Moria “miente” y que no la perdonará jamás.

La disputa entre Georgina Barbarossa y Moria Casán se ha convertido en uno de los enfrentamientos más prolongados y mediáticos del espectáculo argentino, sin señales de reconciliación a la vista.