El estudio de MasterChef Celebrity comenzó a cobrar vida una vez más. El regreso del reality show de cocina, esa competencia que despierta pasiones y polémicas, regresará a la pantalla con Wanda Nara al frente. La noche del jueves, mientras Telefe transmitía el triunfo de Argentina sobre Venezuela por tres goles a cero, el canal, lejos de bajar la temperatura, apostó por mantener la euforia. Al finalizar el partido, presentó con un especial los nombres de los primeros veinte famosos que esta temporada buscarán brillar entre sartenes y cuchillos.
Una a una, las figuras desfilaron –cada presentación acompañada de gestos expectantes y comentarios a media voz–. Había caras conocidas, de esas que vivieron bajo la luz omnipresente de las cámaras, y otras menos vistas, con la narrativa aún por descubrir. “Hay para todos los gustos: figuras con alta experiencia mediática, y otros de los que poco se conoce su vida privada”, reconocieron en el especial. Actores, deportistas, músicos y personalidades de las redes sociales. Todos dispuestos a probarse “en los fuegos”, como sentencia el lema del ciclo. ¿No es acaso ese choque de talentos y egos lo que mantiene la atención pegada a la pantalla?
La conducción del especial estuvo a cargo no solo de la empresaria argentina, esa Wanda que nunca pasa inadvertida, sino también de Vero Lozano. Cuatro lugares quedarán en suspenso, en espera de su propio anuncio y de la cuota de intriga que esto siembra entre los seguidores.

Durante el programa, los guiños de complicidad y ciertos silencios elocuentes anticiparon lo que se vendría. No faltaron los momentos de tensión, como aquel dedicado a una de las nuevas participantes: Evangelina Anderson. “No sé cómo está ella en la cocina. Viene muy bien, tiene unas curvas que son una autopista perfecta. Un lomazo. Comparte algo con mi hijo mayor”, lanzó Nara, al abrir paso a una anécdota personal.
Fue entonces cuando intervino Lozano: “Ustedes en algún momento era como que se odiaban”. La respuesta de Wanda no dejó espacio para dudas: “Sí, nos odiamos. Nos hemos odiado mucho tiempo. Pasó de todo entre nosotras. Pero bueno, la vida nos unió. Viste que la vida tiene muchas vueltas, y hoy compartimos el mismo edificio, la maternidad, un pasado muy parecido. Las dos hemos vivido en Europa. Ella creo que en el último tiempo estuvo en México”.
La conversación, lejos de disipar las distancias, profundizó en la historia de reencuentros y afinidades: “Ella dejó como en pausa su vida para acompañarlo a Demichelis. Y están las dos solteras, mami”, aportó Lozano. Allí, Wanda sumó una de esas frases que pisan fuerte: “Yo, por ejemplo, tengo cinco, pero siempre cuento tres más, por las dudas. Yo digo: si Eva tiene que hacer algo, sabe que cuenta conmigo”, admitió, al subrayar una cercanía inesperada que el tiempo y las circunstancias tejieron. El gesto de solidaridad quedó en el aire: “Pasamos a ser casi familia. Así que estoy muy contenta de que sea parte aunque no sé cómo cocina”, remató.
Pero el show no vive solo de reencuentros. Entre las figuras listas para someterse a la implacable dinámica de las cocinas más famosas del país aparece un nombre capaz de levantar polvareda: Luis Ventura, presidente de APTRA. La empresaria argentina, sin rodeos, puso en foco la tensa historia previa: “Me encanta que se atreva a tenerme cara a cara”, dijo, apenas escuchó su nombre. El periodista, conocido por no guardarse opinión alguna, había asegurado en más de una ocasión que Telefe la había desplazado del canal.
“Me echó un montón de veces de este canal”, insistió Wanda, mientras en el ambiente flotaba la sensación de que, en ese reality, la parrilla también estaría encendida para las cuentas pendientes. “Le voy a hacer muchas preguntas. A mí me gusta mucho hablar las cosas cara a cara. Le preguntaría: ‘¿Por qué me consideraba echada de este programa?’”, desafió la conductora. Y en esa ráfaga de reproches y confidencias, surgió el eco de viejos escándalos: “Quiero saber: ‘¿Le llega un sobre del exterior?’ Tengo muchas cosas para preguntarle”. Las referencias a Mauro Icardi y la China Suárez no tardaron en aparecer, agregando otro matiz a una trama de relaciones cruzadas donde nada parece olvidado.
MasterChef Celebrity promete, una vez más, amalgamar el arte de la cocina con el drama genuino del mundo del espectáculo. Nombres, historias y cuentas pendientes componen el menú principal. Falta saber si, en medio de tanto sabor y revuelo, el público será testigo de reconciliaciones, enfrentamientos inesperados o, quién sabe, nuevas alianzas en el fuego lento de la competencia.