Una tarde de lluvia, mimos y compañía: Laurita Fernández y su perra Miel inseparables en su casa

A través de las redes sociales, la actriz compartió cómo disfrutó de su día libre junto a su mascota en medio de la tormenta que azotó a la ciudad de Buenos Aires

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La actriz y su perrita,
La actriz y su perrita, inseparables, compartieron una tarde de descanso (Instagram)

En medio de un presente laboral de éxitos y de anuncios personales como su reciente inicio del tratamiento de criogenización de óvulos para ser madre en algún futuro, Laurita Fernández demuestra que el cariño más tierno puede venir de la compañía animal. La actriz se tomó un tiempo especial para disfrutar de su perra Miel durante una de las intensas tormentas que azotaron diferentes zonas de Buenos Aires, y no dudó en compartir ese pequeño refugio emocional con sus seguidores en redes sociales.

La historia se desplegó en una serie de imágenes en su cuenta de Instagram, donde Laurita se mostró en su casa, abrazada a Miel. En la primera fotografía, la perra apoyaba su hocico sobre la camiseta negra de Laurita, fundidas en una escena apacible. “Chicos la manito… Voy a morir de amor”, escribió la conductora y bailarina junto a un emoji de nube con lluvia, dejando ver que el mal tiempo afuera era apenas un detalle insignificante comparado a la calidez que reinaba adentro de su hogar.

La postal siguió con otro momento, igual de íntimo. En esa escena, la perra había cambiado de posición pero no de ánimo: seguía pegada a Laurita, quien explicó con humor resignado: “Cambio la posición y yo... inmóvil para no joderla. Lo bueno es que por ella no puedo ir corriendo a buscar una docena de facturas para clavarme mi día libre lluvioso”.

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"Voy a morir de amor", escribió Laurita ante su tarde con Miel

El carrusel doméstico se completó más entrada la tarde. Mientras preparaba un baño de inmersión, Laurita tomó otra instantánea: la perra, fiel, la acompañó y permaneció tendida en la alfombra junto a la bañera. “Bueno hablemos de pegote...”, compartió la actriz, acentuando, entre risas, el apego incondicional de Miel. La imagen, sencilla y honesta, cristalizó cuánto representa el amor animal en su vida cotidiana.

Cabe recordar que no es la primera vez que su mascota se roba el centro de escena en los posteos de la presentadora de Bienvenidos a ganar (Canal Nueve). En abril pasado, la actriz compartió con orgullo uno de sus logros personales más esperados: la culminación de su casa. En ese tour virtual mostró, entre otros detalles, uno que provocó elogios y empatía instantánea entre sus seguidores. El ventanal principal del living tiene una pequeña puerta integrada especialmente para Miel, no como un simple lujo arquitectónico sino como un gesto de amor: una vía libre y exclusiva, pensada para que su perra pueda ir y venir al parque sin depender de que alguien le abra. Laurita lo compartió con una risa genuina. Miel ya tiene su propia puertita. Es ideal para las mascotas de la casa”, y sumó divertida: “Yo estoy muy feliz, pero la que fue más beneficiada fue ella”.

La conductora reconoció que la
La conductora reconoció que la presencial de su perrita la ayudó a evitar a buscar facturas

El vínculo con su perra va mucho más allá de una colección de selfies. Es una conexión honda, con matices de espiritualidad y memoria. En marzo pasado, entrevistada por el Pollo Álvarez para el ciclo Casino Resort de Infobae, Laurita sorprendió con una confesión. Recordó que, antes de tener mascota, solía ironizar sobre quienes trataban a los animales como hijos. “Yo era de los que decían: ‘Esa gente que trata a sus mascotas como hijos...’ Siempre criticaba a los que hablaban así. Pero cuando me tocó… olvídate. Ahora es la dueña de todo”, admitió entre risas.

Detrás de esa transformación, se esconde una historia que convirtió a Miel en mucho más que una compañía. Laurita evocó el duelo por su abuela Rosa, la mujer que la cuidó durante la infancia. Días después de la pérdida, conoció a Miel siendo apenas una cachorra y, al mirarla, encontró en sus ojos el mismo tono, la misma profundidad que identificaba en la mirada de su abuela.

Miel acompañó a Laurita hasta
Miel acompañó a Laurita hasta el baño, donde se quedó junto a ella (Instagram)

Lo relató emocionada: “Cuando la conozco a Miel de bebé, le miro los ojos y tiene los mismos que mi abuela, el mismo color, pero no solamente eso. Era la misma mirada. Te lo juro”. El asombro llegó al punto de que sus seguidores, sin conocer esa intimidad, comentaron en una foto de la perra: “Che, tiene los ojos de tu abuela”.

Así, la actriz encontró en Miel un lazo de ternura y recuerdos, el puente que une trabajo, afectos, pasado y presente, todo bajo el mismo techo y en cada rincón de su hogar.