Alma Cwirkaluk celebró sus 12 años rodeada del cariño de ambos padres y de sus hermanas en un festejo marcado por la armonía familiar. La reunión contó con la presencia de su papá, El Polaco, y su mamá, Valeria Aquino, además de Sol —hija del cantante y Karina “La Princesita”— y Abril, fruto del vínculo con Barby Silenzi, quien también fue parte del festejo. El encuentro se realizó en un ambiente moderno y luminoso, decorado con un fondo brillante y un cartel de “Happy Birthday” iluminado, creando el escenario ideal para retratar el momento especial.
La celebración tuvo un condimento especial: fue un festejo por partida doble. Cuando el reloj marcó la medianoche, la mamá de El Polaco cumplió un nuevo año de vida. Familiares y amigos aprovecharon la ocasión para que la abuela de Alma también soplara las velas junto a su nieta, reforzando el espíritu de unidad y generando otro momento emotivo entre generaciones. Ambas fueron protagonistas de la noche y compartieron el centro de la escena al momento de los saludos y los buenos deseos.
Las imágenes que circularon en redes sociales mostraron a Alma junto a sus padres y hermanas, todos abrazados y sonrientes, lo que transmitió un mensaje de integración y cercanía genuina, lejos de los cortocircuitos del pasado. La elección de atuendos en tonos negros aportó elegancia y sintonía a la jornada, mientras la cumpleañera destacó en el centro del grupo. En otra de las fotos, Alma posó flanqueada por sus dos padres, señal del apoyo y la presencia de ambos en un día clave de su vida.



Una vez finalizada la celebración, Valeria Aquino compartió sus sensaciones a través de una extensa reflexión publicada en redes sociales. Comenzó por describir el evento con entusiasmo: “El cumpleaños de Alma fue soñado”. Subrayó el esfuerzo personal que implicó superar los contratiempos de la organización, con la entrega característica de su rol materno: “Como la súper mina que soy, resolví los percances con el amor y la entrega que me da ser mamá de una nena tan especial, delicada, sencilla, humilde y buena, que el universo me regaló”.
Valeria resaltó los valores de su hija y el vínculo que las une: “Alma tiene un corazón enorme, siempre busca la justicia y el respeto para todos, igual que yo. Y aunque la hicieron llorar, como la súper mamá que soy la abracé y le recordé: ‘Hoy es tu día, nadie te va a opacar. Sé vos, con tu fortaleza y tu corazón puro, noble y sincero’”.
La jornada, según su testimonio, se desarrolló sin altercados: “Nosotras nos portamos súper bien, ningún show ni circo de 5 minutos de televisión. Somos un EQUIPO. SOMOS UNA FAMILIA”. Agregó su gratitud a quienes la apoyaron: “Gracias a eso, el cumpleaños fue maravilloso: gracias al papá, a sus hermanas, la abuela, los padrinos, los tíos, mis amigos y todos los que con su amor hicieron de este día algo inolvidable”. Cerró su mensaje con una frase que sintetizó el espíritu de toda la celebración: “El amor siempre TRIUNFA”.

El Polaco también eligió compartir su perspectiva del cumpleaños y el marco familiar a través de sus redes sociales. Publicó un mensaje breve y contundente: “Gracias DIOS por la hermosa Familia que me diste… No cambiaría nada…”. Con estas palabras, dejó en claro su satisfacción por el presente familiar y el valor que asigna a los lazos construidos con sus hijas y las madres de ellas.
La fiesta por los 12 años de Alma y el cumpleaños de su abuela funcionaron como un testimonio de convivencia pacífica y respeto mutuo entre los distintos integrantes de la familia ensamblada que armó El Polaco a lo largo de los años. La jornada quedó registrada en imágenes y palabras que reflejaron una búsqueda común: priorizar la felicidad de la niña, fortalecer los vínculos familiares y celebrar juntos desde la sencillez y la empatía.