Elegancia, osadía y un guiño personal a la moda local, así fue la entrada de Juana Viale en una nueva emisión de Almorzando con Juana (El Trece), un ciclo donde cada fin de semana, además de las charlas y las confesiones de los invitados, la expectativa se posa sobre el vestuario de la conductora. La noticia principal fue la elección de un traje sastrero negro diseñado especialmente por Gino Bogani, con el que Juana dejó atrás los vestidos para lucir una versión moderna y audaz de sí misma. Esta apuesta diferente no solo marcó tendencia, sino que también fue celebrada por los televidentes y por quienes acompañan el programa en las redes sociales.
Fiel a su rutina, Juana se acercó al centro del estudio, se acomodó ante las cámaras y, antes del clásico saludo a su abuela y a su público, se tomó unos minutos para compartir los pormenores de su look, haciendo del vestuario un verdadero acontecimiento televisivo. “Mirenme, qué lookete maravilloso. Por primera vez, después de pedirlo y rogar: ‘Bogani, ¡vestime como un hombre!’”, exclamó Juana, irradiando humor y satisfacción por el resultado.
Luego, continuó con la descripción de su outfit. “Y acá estoy, con un traje muy hermoso. Es un blazer negro satinado, cruzado, que todavía no domino el botón al revés, con una camisa blanca de seda y una corbata del señor Bogani, auténtica de él, y un pantalón de crepe labrado”, detalló, luciendo el diseño en cada movimiento mientras giraba para mostrar cada ángulo.

El conjunto se completó con una impecable cola alta, lograda por Juan Fojo, estilista fiel de la conductora. Cada mechón estaba peinado con precisión y elegancia, aportando el toque chic y relajado que caracteriza a Juana en cada presentación. El maquillaje, a cargo de Cris Sepúlveda, fue igualmente protagonista: el negro profundo del delineado acompañaba la intensidad del moño y realzaba el brillo en los ojos de la conductora, siempre dispuesta a innovar y a sorprender.
Pero no se trató de una excepción. En la emisión de la semana pasada, el vestuario también había acaparado la mirada de la audiencia. La presentadora deslumbró con un vestuario total-black, también de Bogani, repleto de transparencias, bordados y un detalle imponente en la espalda que no dejó indiferente a nadie. En esa oportunidad, fiel a su estilo frontal e irónico, Juana describió en vivo el modelito: “Tengo un vestido de seda con cuello a la base y vuelta de sisa bordado tipo cinta, un corsé transparente delineando la figura con nervaduras bordadas y un amplio volado transparente que le da movimiento. Chúpate esa, mandarina. Si lo entendieron, es maravilloso, pero lo que ven es lo que importa”, soltó espontáneamente, desatando las risas entre los presentes. Cerró el momento agradeciendo nuevamente a su modista y a su equipo, pilares indiscutidos de cada look.

Aquel día, el peinado plisado y tirante hacia atrás, ejecutado por Fojo, y el maquillaje elegante de Sepúlveda, con delineado celeste y labios en tonos neutros, completaron una apuesta que fue elogiada en redes sociales y por especialistas en moda. Juana sabe cómo utilizar cada prenda, cada peinado y cada accesorio para transmitir un mensaje. Con cada aparición, consolida su lugar como referente de estilo y vanguardia en la pantalla argentina, apostando por la autenticidad y el riesgo.
La construcción de su imagen no es al azar. Cada emisión, cada outfit, lleva la impronta personal de Juana, que ha sabido resignificar el rol de conductora, sumándole frescura y personalidad. El público responde con entusiasmo y complicidad a cada cambio de look, celebrando la forma en que une modernidad, elegancia y humor.