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En los últimos meses, la
En los últimos meses, la rivalidad entre Elon Musk y la empresa desarrolladora de ChatGPT se ha intensificado. (Reuters)

La disputa entre xAI, la empresa de inteligencia artificial fundada por Elon Musk, y OpenAI ha llegado al tribunal federal de California, Estados Unidos.

La compañía de Musk ha acusado a OpenAI de apropiarse de secretos comerciales mediante la contratación de exempleados con acceso a información confidencial sobre Grok, el chatbot de xAI, y sobre las ventajas operativas de la compañía.

El documento legal sostiene que OpenAI ha seguido un “patrón profundamente preocupante” al captar personal clave de xAI. Entre los exempleados mencionados se encuentran el ingeniero Xuechen Li, el también ingeniero Jimmy Fraiture y un alto ejecutivo de finanzas cuyo nombre no se ha hecho público.

xAI es la empresa que
xAI es la empresa que desarrolla la IA Grok. (Reuters)

La demanda afirma que OpenAI buscó específicamente a personas con conocimiento del código fuente de xAI y de sus estrategias para el despliegue de centros de datos, e indujo a estos empleados a violar sus obligaciones de confidencialidad mediante métodos ilícitos.

La querella detalla que xAI descubrió la supuesta campaña de captación mientras investigaba a Xuechen Li, a quien acusa en un proceso separado de llevar información confidencial a OpenAI. Hasta el momento, Li no ha respondido a las acusaciones.

En tanto, la demanda incluye una comunicación entre el abogado de Musk, Alex Spiro, y un exdirectivo de xAI, en la que Spiro le reprocha el incumplimiento de sus deberes de confidencialidad. Según el documento, la respuesta del exempleado fue una frase despectiva.

Sam Altman, CEO de OpenAI,
Sam Altman, CEO de OpenAI, era antes socio de Elon Musk en dicha empresa. (Reuters)

Respuesta de OpenAI

OpenAI ha rechazado las acusaciones de xAI y ha calificado la demanda como un nuevo episodio en la serie de ataques legales de Musk contra la compañía. Un portavoz de OpenAI declaró: “No tenemos tolerancia para ninguna violación de confidencialidad, ni interés en secretos comerciales de otros laboratorios”. La empresa sostiene que la acción judicial responde a la animadversión personal de Musk y no a hechos fundados.

La rivalidad entre Musk y Sam Altman tiene raíces profundas. Ambos cofundaron OpenAI en 2015, pero Musk abandonó la empresa en 2018 tras fracasar en su intento de asumir el control. Desde entonces, Musk ha acusado a Altman de traicionar el acuerdo fundacional de trabajar por el bien de la humanidad, señalando que la alianza de OpenAI con Microsoft y su giro hacia el lucro contradicen esos principios. Por su parte, Altman y OpenAI argumentan que Musk apoyó en su momento el modelo con fines de lucro y que sus acciones actuales obedecen a celos y rivalidad.

En el último mes, Musk también ha demandado a OpenAI y a Apple, alegando prácticas anticompetitivas y acusando a Apple de favorecer a ChatGPT en su tienda de aplicaciones. Altman, en respuesta a las acusaciones, publicó en X que las afirmaciones de Musk resultan sorprendentes, considerando lo que se dice sobre las supuestas maniobras de Musk para beneficiar a sus propias empresas y perjudicar a sus competidores.

OpenAI. (Reuters)
OpenAI. (Reuters)

La batalla legal entre xAI y OpenAI se enmarca en la feroz competencia por el talento en inteligencia artificial en Silicon Valley. Empresas como Meta han invertido sumas considerables para atraer a investigadores y ejecutivos especializados, con la esperanza de obtener una ventaja en el desarrollo de modelos de IA cada vez más avanzados. La captación de expertos y la protección de secretos industriales se han convertido en ejes centrales de la estrategia de las grandes tecnológicas.

En este contexto, la demanda de xAI refleja la intensa lucha por el liderazgo en un sector que mueve miles de millones y donde la contratación de talento especializado puede definir el futuro de la industria.