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Recurrir al modo avión puede
Recurrir al modo avión puede ser útil para interrumpir la conectividad durante conversaciones confidenciales o en sitios públicos. (Pexels)

El crecimiento de la tecnología móvil ha generado una infinidad de mitos en torno a la ciberseguridad y la protección de datos. Muchos usuarios adoptan costumbres o herramientas en busca de sentirse más seguros, aunque pocas veces se detienen a analizar la verdadera eficacia de estas prácticas.

Uno de los casos más extendidos es el uso del “modo avión” como supuesta defensa frente al espionaje cibernético. ¿Es esto una realidad o sólo un mito digital?

Modo avión: utilidad, límites y falsas creencias

El “modo avión” es una función básica presente en casi todos los teléfonos inteligentes y tabletas. Su objetivo central consiste en desactivar todas las conexiones inalámbricas del dispositivo, como Wi-Fi, Bluetooth y redes móviles. Esta función se diseñó originalmente para evitar interferencias durante los vuelos, pero fuera de un avión muchos usuarios la utilizan creyendo que proporciona un escudo eficaz frente al espionaje digital.

Modo avión. (Pixabay)
Modo avión. (Pixabay)

De acuerdo con un estudio realizado por Kaspersky, que consultó a 10.000 personas acerca de su relación con la seguridad digital, todavía predominan mitos y creencias infundadas sobre la protección de la información personal. El 28% de los encuestados consideró que el modo avión es suficiente para evitar la vigilancia de terceros; además, un 67% cree que su teléfono rastrea permanentemente su ubicación. Estas cifras reflejan una preocupación creciente, pero también indican la persistencia de “supersticiones” digitales.

Poner el celular en modo avión sí ofrece ciertas ventajas temporales: bloquea la posibilidad de recibir llamadas, mensajes y conexiones entrantes o salientes, lo que interrumpe la transferencia directa de información a través de la red. Sin embargo, esta medida tiene límites muy claros. Si el dispositivo ya está comprometido por malware o spyware, las aplicaciones maliciosas pueden continuar funcionando y recolectando datos de forma local, sin importar si hay conexión o no.

Un ejemplo concreto es el ataque bautizado como Operation Triangulation. En ese caso, los atacantes consiguieron que el troyano instalado grabara el entorno y recopilara información privada mientras el teléfono estaba desconectado. Una vez que el usuario reactivaba la conexión, el software malicioso enviaba todos esos datos recolectados a los servidores de los ciberdelincuentes. Esta práctica evidencia que el modo avión puede reducir el espionaje en tiempo real, pero no previene el riesgo si el aparato ya está infectado.

El “modo avión” es una
El “modo avión” es una función básica presente en casi todos los teléfonos inteligentes y tabletas. (Unsplash)

En conclusión, recurrir al modo avión puede ser útil para interrumpir la conectividad durante conversaciones confidenciales o en sitios públicos, pero no representa una defensa completa ni infalible frente al espionaje digital y al robo de datos personales. La clave está en la prevención y en una protección integral, no en medidas rápidas o rituales tecnológicos sin fundamento.

Cinco acciones clave para proteger tu celular del espionaje

En vez de confiar en soluciones parciales como el modo avión, resulta fundamental adoptar prácticas efectivas y comprobadas para resguardar la privacidad y los datos almacenados en el dispositivo. Estas son algunas recomendaciones indispensables:

  • Instala software de seguridad confiable
    • Utiliza aplicaciones de seguridad y antivirus desarrolladas por proveedores reconocidos.
    • Estas herramientas detectan y eliminan malware, spyware y otras amenazas, además de realizar monitoreos periódicos ante comportamientos sospechosos.
  • Revisa los permisos de tus aplicaciones
    • Examina regularmente qué permisos has concedido a cada app instalada.
    • Revoca el acceso a información o funciones que no resultan imprescindibles para su funcionamiento.
  • Mantén tu sistema operativo actualizado
    • Procura instalar siempre las actualizaciones del sistema y las apps.
    • Las nuevas versiones suelen incluir parches de seguridad que cierran vulnerabilidades detectadas por los desarrolladores.
  • Evita redes Wi-Fi públicas no seguras
    • No te conectes a redes abiertas o dudosas en espacios públicos.
    • Si necesitas usarlas, hazlo junto con una VPN, que cifra el tráfico de datos y protege tu privacidad contra intrusos.
  • Cifra el contenido de tu teléfono
    • Activa el cifrado del dispositivo en las opciones de seguridad.
    • Así, aunque alguien logre acceder a tus archivos, no podrá leerlos sin la clave correspondiente.