Brechas en el tratamiento del mieloma múltiple, el segundo cáncer de sangre más frecuente en el mundo

Un factor clave que perpetúa la desigualdad es la disparidad en las guías de práctica clínica. Mientras países como Brasil y Colombia han actualizado recientemente sus lineamientos, otros todavía se rigen por protocolos de hace más de una década

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Para avanzar hacia una atención
Para avanzar hacia una atención más justa, es esencial integrar guías clínicas actualizadas en todos los niveles del sistema de salud. (Salud y Vida)

El mieloma múltiple (MM), el segundo tipo de cáncer de sangre más común a nivel mundial, representa cerca del 10% de los nuevos casos de neoplasias hematológicas. Su incidencia crece de forma constante, impulsada por el envejecimiento de la población y el aumento de la esperanza de vida.

En América Latina, países como Brasil, México, Argentina, Colombia, Chile, Perú y Uruguay enfrentan una creciente carga de esta enfermedad, que pone en evidencia marcadas desigualdades en el acceso a tratamientos innovadores y a una atención de calidad.

Mieloma múltiple: terapias avanzadas y brechas entre lo público y lo privado

Uno de los problemas más graves en la región es la brecha entre los sectores público y privado. Según un estudio publicado en The Economist, en 2019 más de la mitad de los pacientes con MM atendidos en centros privados accedieron a terapias de última generación, frente a solo el 15% de quienes fueron tratados en instituciones públicas.

Las clínicas privadas suelen disponer de mejores recursos, acceso a medicamentos innovadores y tiempos de respuesta más ágiles. En cambio, el sector público enfrenta barreras como la limitada financiación, los largos procesos administrativos y la mala gestión de inventarios, lo que retrasa el inicio del tratamiento y compromete los resultados clínicos.

La administración de la terapia
La administración de la terapia con anticuerpos biespecíficos, una esperanza renovada para los pacientes con mieloma múltiple en Perú. Foto: Sanitas

La necesidad de guías clínicas regionales actualizadas

Otro factor clave que perpetúa la desigualdad es la disparidad en las guías de práctica clínica (GPC). Mientras países como Brasil y Colombia han actualizado recientemente sus lineamientos, otros, como México, todavía se rigen por protocolos de hace más de una década.

Esta falta de uniformidad limita la estandarización de tratamientos y genera diferencias en los resultados de salud. La dependencia de guías internacionales —como las de la ESMO o la NCCN— no siempre responde a la realidad latinoamericana, por lo que diversos especialistas de la región han planteado la necesidad urgente de desarrollar una guía clínica regional basada en evidencia local y actualizada.

Obstáculos regulatorios y financieros

El acceso a tratamientos como el trasplante autólogo de células madre (TACM) o las terapias con anticuerpos monoclonales y bioespecíficos sigue siendo muy limitado en muchos sistemas públicos.

El fármaco podría autorizarse para
El fármaco podría autorizarse para tratar otras enfermedades hematológicas e incluso en tumores sólidos (iStock)

Además, los procesos de aprobación para el reembolso de estos fármacos generan demoras prolongadas, lo que agrava aún más las diferencias entre pacientes que reciben atención en distintos niveles del sistema. Esta situación refleja un entorno regulatorio complejo, donde los altos costos y la burocracia limitan la implementación efectiva de terapias innovadoras.

Para avanzar hacia una atención más justa, es esencial integrar guías clínicas actualizadas en todos los niveles del sistema de salud y considerarlas no solo como herramienta médica, sino también como instrumento normativo. Esto permitirá orientar decisiones regulatorias, facilitar el acceso a medicamentos y mejorar los procesos de reembolso.

Solo así será posible cerrar la brecha entre el sector público y privado, y garantizar que los pacientes con mieloma múltiple en América Latina reciban el tratamiento oportuno y adecuado que merecen.

Vista en el microscopio de
Vista en el microscopio de células plasmáticas en un paciente con mieloma múltiple

Opciones actuales para el tratamiento del mieloma múltiple

El tratamiento del mieloma múltiple se adapta a las características de cada paciente y al estadio de la enfermedad. Los médicos suelen combinar varios enfoques para controlar el avance y mejorar la calidad de vida.

Entre las principales opciones se incluyen la quimioterapia, los medicamentos inmunomoduladores y los inhibidores de proteasoma, que ayudan a destruir las células cancerosas. En casos seleccionados, se utiliza el trasplante de médula ósea para reemplazar las células dañadas por células sanas. Además, es común la administración de corticoides y tratamientos de apoyo para prevenir infecciones y controlar el dolor.

El seguimiento constante con el equipo médico permite ajustar la terapia según la respuesta y las posibles complicaciones del mieloma múltiple.