Estuvo preso trece años condenado por haber matado a su familia: la odisea de un hombre inocente y la inoperancia de la justicia
El 28 de septiembre de 2000, hace 25 años, alguien asesinó a Kim y a sus hijos Bradley y Jill, en el garaje de la casa. David Camm, padre y esposo de las víctimas, estaba jugando al básquet esa noche. Tres días después, fue acusado formalmente por el triple asesinato. Un falso experto en criminología, un fiscal “politizado”, tres juicios y la verdad oculta en los zapatos de la mujer