En medio del proceso de un juicio abreviado por el crimen de Bautista Yedro —el niño de nueve años atropellado por un patrullero policial en Villa Fiorito en noviembre de 2023—, la Fiscalía solicitó una condena de cuatro años de prisión e inhabilitación especial para el principal acusado del delito de “homicidio culposo calificado”. Hay otro efectivo implicado.

El fiscal Marcelo Domínguez, a cargo de la investigación, solicitó una pena de cuatro años de prisión y siete de inhabilitación especial para el agente Santiago Silva, el oficial más complicado en la investigación. Para el segundo oficial investigado, Jonathan Arancibia Tejerina, pidió dos años de prisión de ejecución condicional y cuatro años de inhabilitación especial bajo el cargo de “lesiones culposas calificadas”.

La propuesta debe ser admitida por la defensa y presentada ante el Juzgado Correccional 3 de Lomas de Zamora, organismo que definirá la sentencia tras analizar los elementos del caso, según informó el portal Diario Conurbano.

La tragedia tuvo lugar el 4 de noviembre de 2023, cuando dos jóvenes, Agustín Pogonza y Tomás Yedro —primos entre sí—, regresaban a su domicilio en Fiorito en motocicletas luego de ver la final de la Copa Libertadores con otros familiares. Agustín circulaba con su sobrino de cinco años como acompañante, mientras que Tomás transportaba a sus dos hermanos, uno de ellos era Bautista, de nueve años.

Según la reconstrucción oficial, la motocicleta de Pogonza fue impactada desde atrás por un móvil policial perteneciente a la Comisaría 7ma. de Villa Centenario. Como consecuencia, el niño que viajaba con él resultó herido y quedó tendido sobre la vía pública. Ante la emergencia, Tomás Yedro se acercó con su moto para asistirlos e intentó trasladar al menor hacia un centro de salud. En ese momento, con sus dos hermanos como acompañantes, la motocicleta fue embestida por otro patrullero durante una maniobra de retroceso.

Ese segundo impacto, que ocurrió cuando el móvil policial se desplazó marcha atrás, resultó letal para Felipe Bautista Yedro, quien falleció en el lugar producto de un “aplastamiento”, de acuerdo con las pericias.

Los acusados dieron negativo en el test de alcoholemia. Además, fuentes del caso aclararon en su momento a Infobae que esa noche no estaban fuera de su jurisdicción ni de lugar. Acerca de los enfrentamientos con los vecinos, se descartó que usaran armas para reprimir a la gente. “El conflicto fue con personal del Comando y no con la UTOI a la que ellos pertenecen”, agregaron las mismas fuentes.

La causa siguió su curso hasta llegar a un acuerdo de juicio abreviado, instancia en la que el fiscal, tras cotejar pruebas y declaraciones, propuso condenas diferenciadas para los agentes involucrados. A Silva se le imputa el hecho más grave, considerado “homicidio culposo calificado”, por lo que se solicitó para él una sanción de prisión efectiva e inhabilitación especial.

En el caso de Jonathan Arancibia Tejerina, la acusación se limita a “lesiones culposas calificadas”, por lo que la Fiscalía propuso una condena de cumplimiento condiciona. La aceptación de este acuerdo depende de la defensa de los imputados y la homologación del Juzgado Correccional 3, que deberá dictaminar en próxima instancia.

El fiscal Marcelo Domínguez considera que ambos agentes actuaron con negligencia en el procedimiento y que las maniobras realizadas con los móviles policiales pusieron en riesgo a las personas presentes en la escena, derivando en un desenlace fatal.

Los próximos días serán decisivos. El acuerdo alcanzado entre la fiscalía y la defensa, en el marco del juicio abreviado, quedará en manos del Juzgado Correccional 3 de Lomas de Zamora. El tribunal deberá evaluar si aprueba la pena solicitada por el fiscal y determinar si existen elementos para revisar o modificar los términos del entendimiento, considerando la gravedad de las consecuencias y el impacto en la comunidad.