El nene de 12 años que había recibido un disparo en la cabeza mientras jugaba con su amigo en Termas de Río Hondo, Santiago del Estero, murió ayer tras agonizar durante un día.

El incidente ocurrió en una vivienda ubicada en el Pasaje 11, sector B, barrio Villa Balnearia. Se cree que el disparo se efectuó de forma accidental cuando ambos manipulaban una carabina.

La víctima, identificado como Palomino, fue trasladado de urgencia al Centro Integral de Salud de Las Termas. Allí ingresó acompañado por familiares A pesar de los esfuerzos médicos, falleció en la tarde del jueves, según informó el portal del Diario Panorama.

Una mujer alertó a los bomberos voluntarios sobre lo que había sucedido, quienes acudieron rápidamente al lugar para asistir al niño. Posteriormente, se sumó personal de la Comisaría Comunitaria N° 57 De esta manera, iniciaron las pericias correspondientes para esclarecer lo sucedido.

Según la información a la que pudo acceder el medio local El Liberal, ambos jugaban en una habitación de la casa cuando se produjo un disparo. Las circunstancias exactas en las que ocurrió todo aún son materia de investigación. La Fiscalía, bajo la conducción del fiscal Dr. Sabater, ordenó el secuestro del arma, una inspección ocular en el lugar de los hechos y un barrido electrónico para determinar la posible participación activa del menor señalado como autor del disparo.

El caso se registró tan solo diez días después de que un niño de la misma edad se haya disparado en la cabeza con un arma de fuego en Rosario. El menor de edad fue ingresado en el Hospital de Niños Víctor J. Vilela de la ciudad, mientras que el caso es investigador por la Justicia provincial.

El hecho ocurrió cerca de las 2 de la madrugada del 7 de abril, cuando el menor manipulaba una pistola calibre .22 dentro del domicilio de un familiar. De acuerdo con el testimonio brindado por la abuela de la víctima, el arma pertenecía al padre del niño.

La semana pasada un adolescente de 16 años fue detenido en Lomas de Zamora, luego de que intentara darse a la fuga por haberle disparado en el rostro a un amigo. Pese a que la víctima fue trasladada de urgencia a un hospital de la zona, el personal médico no pudo salvarle la vida. Las autoridades no descartan ninguna hipótesis.

El crimen ocurrió el jueves pasado en la intersección de las calles Miatello y Tierra del Fuego, en el barrio Santa Catalina, cuando el acusado se encontraba en plena vía pública junto a la víctima, identificada como Dylan Jacob Minitti, de 22 años.

En ese momento, el menor de edad manipulaba un arma de fuego, cuyo modelo y origen no fueron establecidos. A pesar de que no se determinó cómo fueron los momentos previos al disparo, los investigadores plantearon la posibilidad de que se haya tratado de algo accidental.

El joven de 22 años sufrió un tiro en el rostro, que le provocó heridas de gravedad y murió en el hospital.

Luego de que se abriera una investigación para esclarecer el caso, la Policía Científica constató que la bala había impactado a la altura del maxilar derecho de la víctima. No obstante, no informaron el calibre de la munición.

Por su parte, el menor de edad se dio a la fuga segundos después de que se disparara el arma. Por este motivo, los efectivos de la comisaría de Villa Centenario iniciaron un operativo en la zona para dar con el presunto autor del hecho, a quien detuvieron en la esquina de Miatello y San Manco, es decir, a menos de 100 metros de distancia.

En un principio, la causa inició como una “averiguación de ilícito”, pero tuvo que ser recaratulada como “homicidio”. Asimismo, el expediente se encuentra bajo la intervención del Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil de Lomas de Zamora.