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Con el paso de los
Con el paso de los días, se produciría una descenso en la temperatura (Maximiliano Luna)

Luego de varios días seguidos de temperaturas cálidas, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) activó alertas por tormentas en un total de once provincias. Al Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) no llegarán hoy las lluvias, pero predominarán los cielos nublados.

De acuerdo con el pronóstico que regirá este jueves, más de la mitad de la provincia de Buenos Aires, La Pampa, el este de Río Negro, San Luis, parte del sur de Santa Fe, Chaco, el oeste de Formosa, el este de Salta y el norte de Santiago del Estero se encuentran bajo una advertencia de nivel amarillo.

Por este motivo, las autoridades señalaron que se esperan “posibles fenómenos meteorológicos con capacidad de daño y riesgo de interrupción momentánea de actividades cotidianas”. No obstante, aclararon que las complicaciones no afectarían al AMBA y la Costa Atlántica. Estas zonas serán afectadas mañana por lluvias fuertes.

En este sentido, el organismo anunció que en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) y alrededores se espera un día mayormente nublado. Mientras que la temperatura mínima será de 19 grados y la máxima de 30 grados, también se producirán vientos de hasta 30 km/h.

Las zonas que estarán bajo
Las zonas que estarán bajo alerta durante el jueves

En el caso de la Costa Atlántica, la jornada será similar, aunque se esperan tormentas aisladas por la noche. El termómetro variará entre los 13 y los 23 grados e, incluso, podría haber ráfagas de viento de hasta 50 km/h durante la mañana y la tarde.

De la misma manera, el meteorólogo Christian Garavaglia anticipó que “para el fin de semana se espera una progresiva mejora de las condiciones”, pero advirtió que entre el lunes y martes de la semana siguiente ingresará una masa de aire frío en el centro del país que podría producir “heladas tardías en la región pampeana, entre La Pampa y el sudoeste de Buenos Aires”.

A pesar de esto, el SMN advirtió que la zona más afectada por las tormentas será el sur de la provincia de Córdoba, debido a que estará vigente una alerta naranja por tormentas. Por esto, podrían desarrollarse una intensa caída de agua en períodos cortos de tiempo, acompañado de actividad eléctrica, ráfagas de vientos y hasta la eventual caída de granizo.

En consecuencia de la fuerza que podría cobrar el fenómeno, las autoridades recomendaron evitar las actividades al aire libre y permanecer en construcciones cerradas como casas, escuelas o edificios, ya que estos espacios ofrecen una protección superior frente a descargas eléctricas y otros peligros asociados a condiciones meteorológicas adversas.

No se descarta la caída
No se descarta la caída de granizo en las zonas bajo alerta (Imagen Ilustrativa Infobae)

A su vez, aconsejan mantenerse alejado de artefactos eléctricos y evitar el uso de teléfonos con cable, dado que estos dispositivos pueden actuar como conductores en caso de caída de rayos. En situaciones en las que la tormenta sorprenda durante un desplazamiento, aconsejaron permanecer dentro del vehículo, ya que proporcionan una excelente protección ante descargas eléctricas.

El tránsito por calles inundadas o afectadas representa un riesgo considerable, por lo que se recomienda evitar circular por estas zonas para prevenir accidentes y complicaciones adicionales. En caso de que exista la posibilidad de que el agua ingrese en la vivienda, resulta imprescindible cortar el suministro eléctrico para minimizar el peligro de electrocución.

Rige una alerta por viento zonda en el sur de Mendoza

En paralelo, el organismo meteorológico advirtió que el sur de la provincia de Mendoza estará bajo alerta amarilla por viento zonda. En específico, las mayores complicaciones se registrarían en la zona baja de Malargüe durante la tarde.

El fenómeno generaría ráfagas de hasta 65 km/h, lo que podría derivar en una reducción significativa de la visibilidad, un aumento abrupto de la temperatura y niveles de humedad relativa extremadamente bajos. Por esto, exigieron tener en cuenta medidas preventivas para minimizar riesgos tanto en el entorno doméstico como en la vía pública.

Las previsiones indican que la velocidad del viento Zonda oscilará entre 30 y 45 km/h, con la posibilidad de ráfagas que alcancen los 65 km/h. Estas condiciones podrían provocar la caída de ramas y objetos sueltos, así como dificultar la circulación y la permanencia en espacios abiertos. Por ello, se recomienda asegurar todos los elementos que puedan ser desplazados por el viento, evitando así daños materiales y lesiones personales.

En línea con esto, recordaron que la proximidad de árboles representaría un peligro adicional, ya que la fuerza del viento podría quebrar ramas y causar accidentes. Por este motivo, sugirieron mantenerse alejado de ellos y no estacionar vehículos bajo su copa. Además, para proteger los hogares, será fundamental mantener las viviendas cerradas de la manera más hermética posible, lo que contribuye a evitar la entrada de polvo y a preservar la seguridad de los ocupantes.