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MIÉRCOLES, 1 de octubre de 2025 (HealthDay News) -- Las personas con dolor en las rodillas podrían recibir alivio de un ciclo de radioterapia de dosis baja, sugiere un estudio reciente.

Las personas con artritis de rodilla de desgaste leve a moderado sentían menos dolor y tenían una mejor movilidad tras el tratamiento con radiación, informaron investigadores el domingo en una reunión de la Sociedad Americana de Oncología Radioterápica (American Society for Radiation Oncology), en San Francisco.

"Las personas con osteoartritis dolorosa de rodilla con frecuencia se enfrentan a una elección difícil entre los riesgos de los efectos secundarios de los analgésicos y los riesgos de la cirugía de reemplazo articular", señaló el investigador principal, el Dr. Byoung Hyuck Kim, profesor asistente de oncología radioterápica del Colegio de Medicina de la Universidad Nacional de Seúl, en Corea del Sur.

"Hay una necesidad clínica de intervenciones moderadas entre analgésicos débiles y cirugía agresiva, y creemos que la radiación podría ser una opción adecuada para esos pacientes, sobre todo cuando los fármacos y las inyecciones se toleran mal", añadió en un comunicado de prensa.

La osteoartritis de rodilla afecta a más de 32 millones de adultos estadounidenses, anotaron los investigadores. Ocurre cuando el cartílago que proporciona amortiguación en la articulación se desgasta con el tiempo, lo que eventualmente permite que los extremos de los huesos se froten entre sí.

La radiación de dosis baja se usa regularmente para el dolor articular en países europeos como Alemania y España, pero no ha habido suficientes ensayos de alta calidad para probar la efectividad del método, dijeron los investigadores.

Para el nuevo estudio, los investigadores reclutaron a 114 pacientes con artritis de rodilla de leve a moderada en tres hospitales académicos de Corea del Sur.

Los pacientes se asignaron al azar a uno de tres grupos, recibiendo un ciclo de radioterapia de dosis baja o muy baja o un tratamiento con placebo que no administró radiación. Los cursos de tratamiento duraron seis sesiones para todos los grupos.

Las dosis de radiación fueron inferiores a 5 % de las que se usan normalmente para los tratamientos contra el cáncer y no se observaron efectos secundarios relacionados con la radiación.

"Existe la idea errónea de que la radiación medicinal o terapéutica siempre se administra en dosis altas", dijo Kim. "Pero para la osteoartritis, las dosis son solo una pequeña fracción de lo que usamos para el cáncer, y el tratamiento se dirige a las articulaciones que están ubicadas lejos de los órganos vitales, lo que reduce la probabilidad de efectos secundarios".

Después de cuatro meses, el 70% de las personas en el grupo de dosis baja lograron mejoras significativas en el dolor, la función física y la condición general de la artritis, en comparación con el 42% del grupo de placebo, encontró el estudio.

Alrededor de un 58 por ciento de las personas en el grupo de dosis muy baja también mostraron una mejora, pero el resultado no fue significativamente diferente del placebo, anotaron los investigadores.

A los pacientes no se les permitió tomar nada más que acetaminofén durante el seguimiento, lo que agrega peso a estos resultados, dijo Kim.

"En estudios anteriores, también se usaron medicamentos como los AINE o los opioides durante el periodo de intervención o seguimiento, pero el uso de estos analgésicos podría enmascarar los efectos de la radioterapia", dijo en el comunicado de prensa.

Debido a que los pacientes se limitaron a comer acetaminofén solo durante los cuatro meses de seguimiento en este ensayo, "eso significa que las diferencias entre los grupos de tratamiento son más claramente atribuibles a la radioterapia de dosis baja en sí", agregó.

La radiación podría funcionar mejor en pacientes cuyo dolor se debe a la inflamación, aunque todavía les quede algo de cartílago en la rodilla.

"Para la osteoartritis grave, donde la articulación está físicamente destruida y el cartílago ya ha desaparecido, la radiación no regenerará el tejido", dijo. "Pero para las personas con enfermedad leve a moderada, este enfoque podría retrasar la necesidad de reemplazo articular".

El equipo ahora está completando un seguimiento de 12 meses de los pacientes. Se planean estudios más grandes para proporcionar evidencia adicional.

Kim está convencida de que el tratamiento con radiación podría ayudar a aumentar los efectos de otros enfoques estándar para la artritis de rodilla, como la pérdida de peso, la fisioterapia y los medicamentos.

"En la práctica clínica, las respuestas podrían ser incluso más fuertes cuando la radiación se combina adecuadamente con otros tratamientos, y la satisfacción del paciente puede ser más alta que con las opciones actuales solas", dijo Kim.

Los hallazgos presentados en reuniones médicas deben considerarse preliminares hasta que se publiquen en una revista revisada por profesionales.

Más información

La Arthritis Foundation ofrece más información sobre los tratamientos para la artritis.

FUENTE: Sociedad Estadounidense de Oncología Radioterápica, comunicado de prensa, 28 de septiembre de 2025