Síndrome urémico hemolítico: los síntomas y 10 medidas de prevención para reducir el riesgo de contagio

En el Día Mundial del SUH, los especialistas coinciden en que medidas simples de higiene y manipulación de alimentos pueden marcar la diferencia ante la principal causa de insuficiencia renal aguda en la infancia

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El SUH presenta con mayor
El SUH presenta con mayor frecuencia en niños menores de 5 años, sin embargo, niños más grandes y adultos pueden padecerla ( Imagen Ilustrativa Infobae)

En Argentina, el Síndrome Urémico Hemolítico (SUH) representa una de las amenazas más graves para la salud infantil. El SUH es una afección compleja que involucra la destrucción de glóbulos rojos, disminución de plaquetas y daño renal, con el potencial de afectar múltiples órganos.

La enfermedad, que afecta principalmente a niños menores de 5 años, es la principal causa de insuficiencia renal aguda en la infancia y la segunda de insuficiencia renal crónica en ese grupo etario.

Cada año, se registran entre 300 y 500 nuevos casos pediátricos, lo que convierte a Argentina en el país con la mayor incidencia mundial de SUH.

La enfermedad puede derivar en cuadros severos que pueden evitarse mediante prácticas sencillas de higiene y manipulación de alimentos, lo que convierte a la prevención en la herramienta más eficaz para proteger a los más pequeños.

En el marco del Día Mundial del Síndrome Urémico Hemolítico (SUH), el médico nefrólogo pediatra Juan José Piantanida, del Departamento Materno Infantil del Hospital Alemán remarcó: “El SUH es una enfermedad grave, potencialmente mortal, que afecta principalmente a niños pequeños y que puede prevenirse con medidas simples en el hogar”.

Qué es el SUH y cómo se transmite

Cada año se registran en
Cada año se registran en Argentina cerca de 5.000 infecciones por Escherichia coli productora de toxina Shiga, y más de 300 niños y niñas desarrollan síndrome urémico hemolítico (EUROPA PRESS)

La causa más frecuente del Síndrome Urémico Hemolítico es la infección intestinal tras el consumo de alimentos o agua contaminados con la bacteria Escherichia coli productora de toxina Shiga (STEC).

El contagio puede producirse por carne picada o mal cocida, leche y derivados sin pasteurizar, frutas y verduras sin lavar adecuadamente o agua de origen inseguro.

“El SUH es una enfermedad endémica en nuestro país, donde tenemos la mayor prevalencia en el mundo”, subrayó Diego Ripeau, nefrólogo pediátrico del Hospital de Clínicas José de San Martín

Por su parte, Piantanida, agregó que "afecta principalmente a niños menores de cinco años y puede ser mortal en un 3% de los casos".

Para prevenir el síndrome urémico
Para prevenir el síndrome urémico hemolítico, es esencial utilizar diferentes utensilios para cortar carne cruda y otros alimentos, asegurando una higiene rigurosa en la cocina (Europa Press)

Ambos especialistas coinciden en que además del consumo de productos contaminados, la transmisión puede darse por contacto con materia fecal infectada. Las zonas rurales y los meses de verano registran el mayor número de casos.

Argentina reporta cada año entre 300 y 500 nuevos casos de SUH en menores de cinco años. De quienes sobreviven, la mitad puede desarrollar secuelas permanentes como hipertensión arterial, daño renal o alteraciones neurológicas.

El 20% de quienes padecen insuficiencia renal crónica tras el SUH requerirá trasplante de riñón.

Cuáles son los síntomas del síndrome urémico hemolítico

El síndrome urémico hemolítico se manifiesta inicialmente por una serie de síntomas digestivos y luego por complicaciones hematológicas y renales. Los profesionales recomiendan estar atentos a los siguientes signos en niños, especialmente en los más pequeños:

  • Diarrea acompañada de moco y sangre, a veces con fiebre, vómitos o cólicos abdominales.
  • Palidez repentina, fatiga notable o decaimiento.
  • Disminución o ausencia de orina.
  • Aparición de manchas rojas en la piel (petequias) o hematomas.
  • En los casos más graves, edemas, hipertensión arterial, convulsiones o alteración del estado de conciencia.
El SUH  es la
El SUH es la causa más común de insuficiencia renal aguda en niños (Europa Press)

“Durante los episodios de diarrea, especialmente en pacientes pediátricos, no se recomienda utilizar antibióticos ni antidiarreicos sin indicación del médico, ya que pueden producir complicaciones y favorecer el desarrollo del SUH”, advirtió Ripeau.

En tanto, Piantanida destacó: “El tratamiento precoz con apoyo médico mejora las posibilidades de recuperación y reduce complicaciones”.

Ante cualquiera de estos síntomas se sugiere consultar de inmediato con un profesional y no administrar medicación por cuenta propia.

El control médico se mantiene aún después de superada la etapa aguda, dado que las secuelas pueden aparecer incluso años más tarde, sin síntomas aparentes. Los especialistas subrayan que el seguimiento debe ser estricto, con controles periódicos.

Los alimentos contaminados con STEC
Los alimentos contaminados con STEC incluyen carne poco cocida, leche no pasteurizada, vegetales y frutas sin lavar adecuadamente, entre otros (Imagen Ilustrativa Infobae)

10 medidas de prevención para reducir el riesgo

Los especialistas coinciden en la prevención es el recurso más eficaz y accesible para controlar la propagación del SUH.

A continuación, las acciones principales que deben practicarse a diario:

La prevención del síndrome urémico
La prevención del síndrome urémico hemolítico incluye cocinar las carnes completamente hasta que no queden partes rojas, evitando la contaminación cruzada y asegurando la correcta higiene de las manos y utensilios de cocina (freepik)
  1. Cocinar todas las carnes, en especial la picada y hamburguesas, hasta eliminar partes rosadas (más de 75 °C) y verificar que los jugos salgan claros.
  2. No ofrecer carne picada o productos de origen y cocción dudosa a niños menores de 8 años.
  3. Consumir leche, yogur y quesos únicamente si son pasteurizados y en cadena de frío.
  4. Evitar quesos caseros sin control sanitario y nunca dejar yogur abierto fuera de la heladera.
  5. Lavar frutas y verduras bajo un chorro de agua potable. Utilizar una solución desinfectante apta (ejemplo: dos gotas de lavandina por litro de agua) y cepillar superficies duras antes de pelar.
  6. Separar completamente las carnes crudas de otros alimentos para evitar contaminación cruzada. Usar tablas y cuchillos distintos para carne y vegetales y limpiar profundamente con agua caliente y detergente.
  7. Mantener las manos limpias, lavándolas con agua y jabón antes de preparar o consumir alimentos, después de manipular carne cruda, ir al baño, cambiar pañales o tocar animales.
  8. Utilizar solo agua potable. Ante duda, hervir el agua tres minutos, o desinfectarla con lavandina en la concentración indicada.
  9. Refrigerar alimentos perecederos en las dos horas posteriores a su preparación (una si el ambiente es cálido). Mantener la comida cocida por encima de 60 °C.
  10. Elegir siempre establecimientos con buenas prácticas de higiene y preparación alimenticia correcta al consumir fuera del hogar. Evitar verduras sin lavar y jugos no pasteurizados.
Si se sospecha de SUH,
Si se sospecha de SUH, se debe buscar atención médica de inmediato (Imagen Ilustrativa Infobae)

Ripeau destacó: “El lavado de manos y la cocción adecuada de las carnes son las medidas más potentes para cortar la cadena de transmisión, seguidas por la correcta manipulación y conservación de los alimentos.”

Los avances en la investigación del SUH

Aún no existe un tratamiento específico que cure el síndrome urémico hemolítico; el abordaje terapéutico se basa en el soporte médico: hidratación controlada, manejo de la insuficiencia renal y control de la anemia, con diálisis en los casos graves. El 60% de los pacientes internados por SUH requiere diálisis en la fase aguda y es frecuente la aparición de complicaciones renales persistentes.

Como contó Infobae, actualmente, Argentina lidera los ensayos internacionales en busca de nuevas terapias. El país participa en un estudio fase III con un tratamiento biológico basado en anticuerpos policlonales denominados INM004, destinados a neutralizar la toxina Shiga responsable de la enfermedad.

La investigación, impulsada por la biotech argentina Inmunova y desarrollada en 21 hospitales argentinos y centros europeos, tiene como objetivo reducir mortalidad, necesidad de diálisis y secuelas renales, lo que podría transformar el pronóstico de la enfermedad infantil.