
A Roberto Mosquera se le ha encomendado solo una función como entrenador del Alianza Universidad de Huánuco: levantar el nivel del club para zafar de las últimas plazas de la Liga 1 2025 que garantizan un descenso asegurado. Sin embargo, con el avance de las fechas, ha quedado demostrado que la tarea se complica demasiado.
En las últimas cuatro fechas del Torneo Clausura 2025, la UDH ha sufrido constantes caídas que han ubicado al técnico nacional en el foco de la polémica. La situación se ha agravado, conviene subrayar, luego de la reciente goleada (5-1) sufrida a manos de Sport Huancayo.

Mosquera ha reconocido que la espiral de malos resultados es asunto suyo, responsabilizándose por lo sucedido en el último mes. No obstante, se ha desmarcado de un aspecto puntual que, básicamente, ha influido en el reciente descalabro en Huancayo: las expulsiones que afectan y alteran el trabajo de la semana.
“Yo me tengo que hacer cargo de todo lo que sucede, pero de lo que no me puedo responsabilizar son de las expulsiones. No sabemos qué hubiera pasado si terminábamos con 11 jugadores porque siempre con 10 todo se complica mucho más. Tenemos que concientizarnos de que esto lo sacamos adelante todos, pero hay que evitar regalar ventajas como hoy", sostuvo.
En su mismo descargo, el profesional peruano de Alianza Universidad ha exhortado a su grupo a que se acostumbre a disputar cada una de las presentaciones finales con la presión encima, porque de lo contrario los invita a practicar otro deporte que implique mayor serenidad.
“El equipo está bien preparado, pero acá tenemos que acostumbrarnos a jugar con presión. Yo jugué al fútbol y me acostumbré a hacerlo, y el que no puede, mejor que se dedique a otros deportes como el ajedrez. Ya estoy acostumbrado a estos momentos y haremos todo lo posible por salir adelante. No es fácil, pero vamos a seguir trabajando para revertir esta situación", concluyó Mosquera.
