El precandidato a la presidencia de libertad Popular, Rafael Belaunde Llosa, fue víctima de un ataque de sicarios en Cerro Azul, Cañete. Según señaló el candidato a la vicepresidencia del partido, Pedro Cateriano, el atentado ocurrió cuando estaba visitando terrenos de su propiedad en la zona.
Afortunadamente, Belaunde Llosa consiguió salir ileso, salvo algunas cortadas en el rostro, producto de los vidrios que estallaron tras los impactos de bala. Según informó Latina Noticias, el auto en el que iba el empresario tenía lunas blindadas, es por eso que el ataque no tuvo consecuencias fatales.
El vehículo atacado está a nombre de la inmobiliaria de Belaunde Llosa, vinculada a negocios de terrenos en Cañete. En las primeras imágenes difundidas, por los propios militantes de Libertad Popular, se ve al parabrisas del auto con tres impactos de bala en la zona del conductor.

Alrededor de los orificios, se ve el resto de la luna rajada y algunas astillas de vidrio en la consola del auto. El comandante general de la PNP, general Óscar Arriola, señaló que Belaunde Llosa se defendió y disparó contra los delincuentes que lo atacaron.
Una de las acciones inmediatas de las autoridades fue implementar el plan cerco en la zona, para lograr detener a quienes participaron en el ataque.
¿Cuáles son las primeras hipótesis sobre el atentado?
El atentado contra Rafael Belaunde Llosa en Cerro Azul ha abierto múltiples líneas de investigación, pero una de las primeras hipótesis señaladas proviene del exjefe de la Dirección Nacional de Inteligencia, Juan Carlos Liendo.
Para él, el ataque responde a un patrón típico del crimen organizado: primero se busca inmovilizar al conductor para tener control total del vehículo y, luego, avanzar hacia el objetivo principal. Según la información policial preliminar, Belaunde y su chófer fueron interceptados por una moto cuyos ocupantes dispararon directamente contra el parabrisas. El propio Liendo explicó que este modus operandi es común en secuestros o atentados dirigidos.
“En las fotos que yo he visto es un impacto de frente. Sobre a la altura del conductor. Normalmente, en un secuestro, en un ataque sobre una personalidad de relevancia a su vehículo, al primero que se neutraliza es al conductor, ya sea para secuestrarlo o posteriormente atentar contra la vida del real objetivo. En este caso, no hay más información”, afirmó.
Un atentado en campaña electoral
El atentado ocurre en pleno proceso electoral, lo que incrementa su gravedad. Para Liendo, el ataque refleja un contexto de criminalidad desbordada que ya ha comenzado a mezclarse con la política.
“Más allá del móvil, los hechos violentos se relacionan de alguna manera con la campaña electoral y nos muestra el alto nivel de violencia que el Estado y las fuerzas de seguridad del país no pueden enfrentar y no pueden hacer que disminuya”, advirtió.

El exfuncionario recordó, además, que este no es un hecho aislado. Días antes, en Piura, se perpetró un ataque contra Percy Ipanaqué, candidato a la Cámara de Diputados por Juntos por el Perú, episodio que terminó con un hombre asesinado.
“En concreto, lo que estamos viendo es un hecho de violencia sobre una persona que está postulando a la presidencia de la República. Esto no es una cosa menor”, añadió.



