La condena a Martín Vizcarra impactó de lleno en el ámbito político y social del Perú, sacudiendo tanto a sus seguidores como a opositores. El fallo judicial que determinó catorce años de reclusión para el expresidente, señalado por corrupción durante su etapa como gobernador de Moquegua, se convirtió en un suceso clave en la agenda nacional y dejó múltiples reacciones en su entorno familiar y político.
El caso involucra acusaciones de sobornos millonarios, pagos indebidos de empresas constructoras y una resolución legal con efecto inmediato, que incluye además la inhabilitación para todo cargo público durante nueve años. En las afueras del tribunal, entre la multitud y el despliegue policial, el hermano del exmandatario, Mario Vizcarra, se pronunció con fuerza y calificó la jornada como un “día negro” para el país. Sus declaraciones y el clima en las calles expresaron la magnitud de la conmoción.
El hermano de Vizcarra califica la condena como “día negro”
Mario Vizcarra, hermano del exgobernante, fue una de las voces más visibles tras conocerse el veredicto. Desde una camioneta en las inmediaciones del tribunal, se dirigió a los medios y a los simpatizantes de Martín Vizcarra con un mensaje breve y contundente: “Hoy es un día negro, es un día de vergüenza”.

A lo largo de la jornada, Mario Vizcarra reiteró su apoyo a su hermano, denunciando lo que consideró una victoria de intereses oscuros sobre la justicia. Señaló que la familia esperaba una resolución de esta naturaleza, aunque la tristeza predominó en el ambiente. Según sus propias palabras, la decisión judicial refleja un momento amargo y de desencanto para quienes confiaban en una salida diferente.
Audiencia y clima en los exteriores
El operativo de seguridad rodeó desde temprano el edificio del Poder Judicial, donde el exmandatario debía comparecer por los casos Lomas de Ilo y Hospital de Moquegua. Martín Vizcarra escuchó la sentencia rodeado de agentes y funcionarios, mientras en el exterior crecía la presencia de seguidores, quienes se mostraban atentos a cada desarrollo.
Con el correr de las horas, la cantidad de simpatizantes disminuyó, aunque al momento de la lectura final del fallo el apoyo era visible. Las pancartas y los cánticos de quienes rodeaban el tribunal acompañaron las declaraciones de Mario Vizcarra, marcando una jornada de alta tensión pública. La escena del político revisando su teléfono móvil al escuchar la sentencia evidenció el golpe que significó la decisión del tribunal.
Detalles del fallo judicial y acusaciones
El Cuarto Juzgado Colegiado de la Corte Superior Nacional fue el responsable de dictar la condena de catorce años de prisión para Martín Vizcarra, tras hallarlo culpable de cohecho al aceptar pagos irregulares por parte de consorcios constructores. Los jueces detallaron que los sobornos sumaron S/ 2,3 millones, entregados a cambio de adjudicaciones de grandes proyectos en Moquegua. La magnitud de los hechos investigados incluyó la entrega de dinero en efectivo y otros beneficios provenientes de compañías como Obrainsa e ICCGSA.
La sentencia estableció también la inhabilitación por nueve años para ejercer cualquier función pública, así como la detención inmediata del exjefe de Estado. El tribunal recalcó que la condena responde a la gravedad de los hechos y al aprovechamiento del cargo por parte de Vizcarra, cuya responsabilidad penal fue considerada plenamente demostrada en el juicio.
Mensajes, reacciones y panorama político
Luego de conocida la resolución, Martín Vizcarra utilizó sus redes sociales para cuestionar la legitimidad del proceso y denunciar que se trató de una represalia política. Sostuvo que no dejará de alzar la voz y que su equipo continuará la campaña pese al revés judicial, delegando a su hermano Mario la representación y el liderazgo en próximas acciones.

Simultáneamente, en las calles de Lima y en redes, distintas figuras del ámbito político y social se pronunciaron sobre la sentencia. Algunos remarcaron la importancia de la decisión para la lucha contra la corrupción en el país, mientras que simpatizantes de Vizcarra aseguraron que persistirán en el respaldo a su causa. La escena al final del día reflejó un país polarizado, atento al cumplimiento inmediato de la condena y a los pasos siguientes de uno de los protagonistas centrales de la política peruana.



