La relación amical y laboral entre Paco Bazán y Erick Delgado llegó a un punto de quiebre irreversible. Lo que alguna vez fue un proyecto compartido entre dos exarqueros con química en pantalla y un pódcast exitoso, hoy se ha transformado en un enfrentamiento directo, cargado de reproches, revelaciones y hasta una carta notarial que terminó por sepultar cualquier intento de reconciliación.
Todo comenzó cuando, durante un informe difundido en ‘Magaly TV: La Firme’, se presentó una serie de declaraciones que mostraban el desgaste creciente entre ambos.
Desde la primera intervención, el tono dejaba claro que la relación estaba rota:“Se le acabó el tiempo a la relación amical y la sociedad que había entre los exarqueros Paco Bazán y Erick Delgado, porque Erick le sacó roja a su excompañero”, se escuchaba en el reportaje.

Erick Delgado explica el motivo de la salida de Paco Bazán
Acto seguido, Erick Delgado apareció explicando su molestia, dejando ver que su distanciamiento no era reciente ni abrupto, sino consecuencia de un acumulado de situaciones que consideró irrespetuosas.
“Del único hincha que soy yo, es de mi hijo. Y vivos, hay uno solo, y ese es Luis Miguel, creo. Yo hincha de nadie soy”, dijo al inicio, marcando distancia. Luego añadió:
“Así como yo te doy respeto, dame respeto, ¿no? Yo te llamo o, mejor dicho, cuando tú me llamas y me pides un favor, yo te contesto. Y si hay una amistad de por medio, tú sabes que el amigo te va a contestar. Entonces, cuando yo te hago lo mismo, por lo menos contesta. Y eso es lo que estaba pasando”.
Consultado por el reportero, confirmó que Paco no le contestaba las llamadas o lo hacía muy tarde:“No, muchas veces le escribía y me contestaba dos días después. No sé si ha cambiado. Yo creo que siempre el corazón no cambia. Hay veces tardas en conocer a las personas completamente”.

Paco Bazán y las fricciones con Erick Delgado
De acuerdo con Delgado, el quiebre entre ambos venía desde el año pasado, cuando ya se advertían tensiones en el pódcast. El informe recordaba que todo empezó a deteriorarse desde que Bazán, según Erick, insistía con pedirle una valoración que incomodó al conductor. “Creo que donde hubo un quiebre en la relación que teníamos fue cuando él insistía para que me califique y yo creo que no tuve la actitud suficiente de pararlo”, reconoció.
Las fricciones crecieron al punto de afectar la dinámica del programa. Según Delgado, él terminó cargando con toda la responsabilidad:“El que se encargó de todo fui yo. Él solamente venía por cobrar su parte, lo cual era válido, y tratar de tener su presencia en estos últimos días que ya, pues, se ausentó cuatro o cinco veces. Ya la verdad que fue la gota que derramó el vaso. Era insostenible. Llegábamos tarde siempre o entrábamos tarde. Yo he estado remando. Muchas veces no venía”, afirmó.

La situación llegó al límite cuando, según Erick, Paco apareció para pedir que vendieran el canal a medias:“Creo que él me dijo para vender el canal y la verdad que el canal no está en venta”, contó indignado.
Luego lanzó una acusación que sorprendió a todos:“¿Hay inversión de Paco acá? ¿Paco ha puesto un sol?”Y él mismo respondió: “No. La inversión es mía. Todo para montar este estudio, tener un sitio donde grabar. Absolutamente, nada del dinero de él se tocó. Todo el dinero que le tocaba se lo di todo en la mano. Siempre me lo pedía en la mano, por si acaso”.

Erick Delgado sobre carta notarial
Según Delgado, la ausencia constante de Bazán incluso provocó que la marca principal del pódcast se retirara. Esa situación habría detonado una discusión fuerte el último lunes, con palabras “irreproducibles”, según dijo, pero que prefirió callar para “no hundir más” a Paco. Sin embargo, la tensión aumentó cuando, horas después, Bazán le envió una carta notarial prohibiéndole usar su nombre, imagen y voz.
La reacción de Erick fue contundente:“¿Tú crees que un amigo te hace esto? Nunca terminas de conocer a las personas. Yo no necesito de la imagen de nadie. La carta notarial te diría… si estuviéramos en el pódcast, por dónde me la…”, dijo entre risas irónicas. Luego añadió: “No pasa nada. Que se quede tranquilo. Su imagen no me interesa”.




