El fervor y la emoción marcaron la jornada del cuarto recorrido del Señor de los Milagros en el Callao. Lo que debía ser una manifestación de fe y recogimiento se convirtió, por breves instantes, en una escena de tensión y preocupación colectiva. Decenas de fieles acompañaban la imagen cuando los cargadores del anda, que sostienen al Cristo Moreno, perdieron el equilibrio en dos ocasiones casi consecutivas, generando susto y desconcierto entre los asistentes.
El suceso ocurrió en la cuadra 13 de la avenida Sáenz Peña, punto neurálgico del recorrido procesional. A las 13:37 horas, el sonido del martillo marcó el inicio de un nuevo avance, pero el peso del anda se inclinó hacia un lado y estuvo a punto de desplomarse. Los cargadores reaccionaron de inmediato y lograron bajarla para estabilizarla. Apenas un minuto después, a las 13:38, la escena se repitió. Esta vez, el anda se ladeó hacia el lado contrario, provocando gritos y expresiones de alarma entre los devotos.
Los murmullos se mezclaron con plegarias y exclamaciones. Algunos asistentes, con el sobresalto aún en el rostro, comentaban entre sí: “No quiere irse del Callao, que se quede”. La incertidumbre duró unos segundos, hasta que los hermanos de la cuadrilla 7 retomaron el control y ajustaron la posición del anda para evitar un posible accidente.
Finalmente, a las 13:40 horas, tras un tercer intento, el anda logró la estabilidad necesaria para continuar su recorrido. La multitud estalló en aplausos, en un gesto de alivio y agradecimiento. La procesión siguió su paso habitual, avanzando con más cuidado por las calles chalacas.
Dos intentos fallidos antes de la estabilidad

De acuerdo con la información registrada, el primer incidente se produjo cuando los cargadores intentaban levantar el anda después de una breve pausa. El movimiento, acompañado del toque del martillo, provocó un desequilibrio inesperado debido al peso de la estructura y la cantidad de fieles concentrados en el trayecto.
El segundo intento ocurrió casi de inmediato, cuando los cargadores intentaron retomar la marcha. Esta vez, el anda se inclinó hacia el lado opuesto, generando un nuevo sobresalto entre los fieles. Algunos retrocedieron para evitar un posible impacto, mientras otros extendieron los brazos con la esperanza de ayudar a sostener la imagen.
Pese al temor inicial, la devoción se impuso. La cuadrilla responsable del tramo logró controlar la situación y asegurar que la imagen del Señor de los Milagros retomara su andar por el Callao. Los presentes acompañaron el momento con cánticos y oraciones, buscando recuperar la calma tras el susto.
La procesión, una de las más multitudinarias del país, continuó conforme a lo programado, aunque con un paso más prudente. La coordinación entre las cuadrillas y la participación ordenada de los cargadores fueron esenciales para evitar que el incidente pasara a mayores.
El episodio quedó en la memoria de los asistentes como un recordatorio de la entrega y esfuerzo que demanda portar el anda del Cristo Moreno, símbolo de fe que cada octubre convoca a miles de devotos en todo el país.
Ruta oficial del cuarto recorrido

La procesión comenzó a las 6 a. m., cuando la imagen del Cristo de Pachacamilla salió del Santuario de las Nazarenas, en el Cercado de Lima. El Nazareno Móvil recorrió avenidas emblemáticas como Tacna, Nicolás de Piérola, Óscar R. Benavides, Tingo María, Mariano H. Cornejo, Universitaria y La Marina.
Tras su llegada al Callao, la ruta seguirá por Guardia Chalaca, Sáenz Peña y Pacífico. En este punto se celebrará una misa en honor al Señor de los Milagros, y, al concluir, el anda regresará a Lima siguiendo el mismo trayecto hasta retornar al santuario.



