
El departamento de Piura vivirá este 13 de octubre una nueva edición del día central de la Festividad del Señor Cautivo de Ayabaca, una tradición que trasciende lo religioso y se asienta como una de las expresiones culturales más representativas del norte peruano.
De acuerdo a la Ordenanza Regional N.º 443-2019-CR/GOB.REG.PIURA, publicada oficialmente en el Diario El Peruano, esa fecha ha sido declarada como día no laborable en homenaje a la peregrinación y festividad, privilegio que alcanza a entidades públicas de la región y puede ser adoptado bajo acuerdo en el sector privado.
La festividad del Señor Cautivo de Ayabaca moviliza cada año a miles de peregrinos procedentes de diferentes provincias y regiones, como Sullana, Tumbes, Cajamarca e incluso del sur de Ecuador.
Muchos fieles se trasladan a pie en travesías de días para llegar al santuario, ubicado a más de 2.800 metros sobre el nivel del mar en la sierra piurana. En el día central, el 13 de octubre, la procesión y los actos litúrgicos adquieren su máxima expresión, consolidando la devoción regional y el sentido de comunidad.

La imagen del Señor Cautivo, de estilo barroco, representa a un Cristo maniatado y vestido con túnica púrpura ricamente adornada. Para los devotos, sus poderosas manos atadas y su rostro de sufrimiento evocan esperanza, reconciliación y fe.
El culto está profundamente arraigado en la población local, pero también ha trascendido fronteras regionales, convirtiéndose cada octubre en destino de peregrinaciones multitudinarias y encuentros de hermandades religiosas.
La ordenanza regional que declara el día no laborable señala que la disposición tiene como finalidad propiciar actividades de culto y devoción, además de generar condiciones para el desarrollo turístico, cultural y educativo en la región.
De esta manera, se busca fortalecer la identidad local y dinamizar la economía del área andina de Piura a través del impulso del turismo religioso y la valorización de su patrimonio. Entre los atractivos destacan las ruinas de Aypate, los geoglifos de Samanga y Samanguilla, y los bosques de neblina de Cuyas, recursos que se proyectan para el desarrollo del turismo rural comunitario.

El feriado regional abarca a todas las dependencias estatales del departamento de Piura, mientras que en el sector privado la adhesión es opcional mediante acuerdo entre empleadores y trabajadores. Las horas dejadas de laborar deberán recuperarse después, según establezcan las entidades correspondientes. Asimismo, la norma garantiza la continuidad de servicios esenciales para la población, incluso durante el día no laborable.
La peregrinación al santuario de Ayabaca es reconocida como una de las más significativas del país, tanto por la cantidad de participantes como por el fervor que despierta.
El evento ha recibido importantes reconocimientos, entre ellos la Medalla de Honor del Congreso de la República durante el X Congreso Nacional Eucarístico y Mariano. El propio templo de Ayabaca fue elevado a la categoría de santuario mediante decreto episcopal, con el respaldo de la comunidad y la bendición de representantes eclesiásticos.
La festividad no solo reúne a la población local y visitantes del país, sino que también fomenta el fortalecimiento de la cohesión social y de la identidad regional. La realización anual del feriado refuerza la promoción de actividades culturales, educativas y turísticas que valorizan la herencia y las tradiciones de la sierra de Piura.
De esta manera, el 13 de octubre no solo representa una pausa laboral, sino una oportunidad para celebrar la fe, mantener viva una costumbre ancestral e impulsar el desarrollo económico y social a través de la cultura y el turismo, integrantes indisolubles de la vida piurana.