
Cada mes de octubre, Lima se convierte en escenario de una de las manifestaciones religiosas más multitudinarias del país. Miles de fieles acompañan la procesión del Señor de los Milagros, tradición que se remonta a más de tres siglos y que, con el paso del tiempo, ha cruzado fronteras hasta llegar a distintas ciudades del mundo. Este 2025, la celebración adquiere una dimensión inédita con la realización de la primera “Levantada Mundial”, una ceremonia simultánea que unirá a devotos de cincuenta y cuatro hermandades distribuidas en catorce países.
El sábado 4 de octubre, al mediodía, la campana sonará en el monasterio de las Nazarenas en Lima. En ese instante, el anda del Cristo Moreno se levantará en señal de inicio de la procesión. Pero no será un acto aislado: en ciudades tan distantes como París, Roma, Nueva York, Santiago de Chile o Komaki, en Japón, las hermandades levantarán también sus andas al mismo tiempo. La sincronía marcará un acontecimiento inédito en la historia de esta devoción.
José Luis Toledo Zapata, mayordomo general de la Hermandad del Señor de los Milagros de Nazarenas, explicó para RPP que esta iniciativa responde a una inspiración nacida de un diálogo entre el papa Francisco y el arzobispo de Lima, Carlos Castillo. “El Papa le dijo que qué fuerte sería la evangelización si todas las hermandades del Señor de los Milagros en el mundo evangelizaran. En honor a esa idea hacemos esta levantada mundial”, señaló.
El reto de coordinar el evento ha exigido meses de preparación. Diferencias horarias, disponibilidad de parroquias y la logística local representaron obstáculos que, según Toledo, se abordaron con anticipación. “Desde marzo del año pasado estuvimos en reuniones con todas las hermandades del mundo. Incluso realizamos un ensayo general para verificar la coordinación”, explicó.
Una tradición que trasciende fronteras

La procesión limeña iniciará su recorrido en la avenida Tacna, seguirá por la avenida Emancipación y los jirones Chancay y Conde de Superunda, antes de retornar al monasterio de las Nazarenas cerca de las ocho de la noche. Durante la jornada se prevé un homenaje a los hermanos jubilados y un acto especial en el local institucional.
En paralelo, ciudades de Europa, Norteamérica y Sudamérica ajustarán sus horarios para coincidir con el mediodía limeño. “Tenemos cincuenta y cuatro hermandades que van a participar, como las de París, Zurich, Madrid, Roma, Estocolmo, Hamburgo, Nueva York, Washington, Las Vegas, San José de Costa Rica, Ciudad de Panamá, Santiago de Chile, Caracas y también las del interior del país como Trujillo, Chiclayo, Huancayo, Chimbote y Barranca”, detalló Toledo Zapata.
El compromiso de los devotos en otros continentes ha requerido esfuerzo adicional. En Japón, por ejemplo, la hermandad de Komaki realizará la ceremonia a las dos de la mañana debido al cambio horario. “A pesar de la dificultad, quieren estar presentes y participar de esta levantada mundial”, destacó el mayordomo general.
Además de la sincronización mundial, este año la imagen volverá al Callao luego de veintidós años. La procesión chalaca se enmarca en el Año Jubilar 2025, una conmemoración que busca reforzar la unión entre comunidades. “Queremos hacer de este año un tiempo de amor, unión y fraternidad. Por eso regresamos al Callao, un lugar donde la devoción también forma parte de la historia”, indicó Toledo.
El anda partirá de madrugada para llegar cerca de la una y media de la tarde a la intersección de Sáenz Peña con República de Panamá. Allí se celebrará una misa de campaña junto con las andas del Señor del Mar y la Virgen del Carmen de la Legua. Según Toledo, será una oportunidad para que “Nuestro Señor derrame bendiciones también a todo el pueblo chalaco”.
Un despliegue con medidas de seguridad

La magnitud del evento en Lima exige un plan operativo especial. La Hermandad ha trabajado junto con la Policía Nacional, el Ministerio de Salud, EsSalud y los Bomberos para garantizar orden y seguridad. “Pedimos a los devotos que si van con niños pequeños les coloquen una tarjeta con su dirección o establezcan un punto fijo de reunión. Queremos tranquilidad para todos los fieles”, recalcó Toledo.
La coordinación internacional y el regreso al Callao se suman a la tradición que cada octubre reafirma la devoción de millones de peruanos dentro y fuera del país. El 4 de octubre no solo marcará el inicio de la procesión limeña, sino también el primer gesto conjunto de hermandades distribuidas en distintos continentes, todas respondiendo a un mismo llamado: el toque de campana en las Nazarenas.