Tony Janzen Valverde Victoriano, conocido como ‘Pequeño J’, permanece en custodia de la Policía Nacional del Perú a la espera del proceso de extradición solicitado por las autoridades de Argentina. Luego de ser sindicado como el autor del triple feminicidio de Lara, Brenda y Morena.
El señalado como el narco peruano fue detenido en el distrito de Pucusana, al sur de Lima, cuando Valverde se ocultaba en la cabina posterior de un camión de carga con el objetivo de llegar a la capital peruana. Según declaraciones del teniente general Zenón Loayza Díaz, jefe de la Dirección de Investigación Criminal de la Policía Nacional, la extradición de Valverde depende de las gestiones formales.
“Se va a esperar el procedimiento de extradición que soliciten las autoridades de Argentina, teniendo en cuenta que ambos cuentan a la fecha con las órdenes de capturas internacionales”, explicó.

Mientras que la situación de Matías Osorio, ciudadano argentino señalado como lugarteniente de ‘Pequeño J’, será sometido a un procedimiento de expulsión del país, dado que ingresó de forma irregular y no hay registro oficial de su entrada a territorio peruano.
La expulsión de Osorio podría concretarse en los próximos días, una vez que la División de Extranjería remita el informe respectivo a Migraciones, mientras que la extradición de Valverde podría tomar varios meses.
Niega vinculación con el triple feminicidio
Durante la intervención policial, Tony Valverde negó los cargos en su contra sobre el caso que conmocionó a Argentina. Según la acusación, el triple homicidio corresponde al asesinato de tres jóvenes argentinas, dos de ellas de veinte años y una menor de quince.

“Me están echando la culpa nada más. No hemos matado a nadie, que tienen que encontrar al culpable porque yo no tengo nada que ver”, replicó a los medios de comunicación cuando era detenido.
La investigación continúa para esclarecer si otras personas también facilitaron su desplazamiento por territorio peruano. Hasta la concreción de los procedimientos judiciales y administrativos, tanto ‘Pequeño J’ como Matías Osorio continuarán bajo custodia de la Policía Nacional del Perú, bajo la coordinación de las autoridades argentinas y la División de Extranjería.
Detrás del sicario
El padre de Tony Valverde, conocido como “Pequeño J”, estuvo vinculado a la organización criminal ‘Los Injertos de Nuevo Jerusalén’, activa en el distrito de La Esperanza. La influencia de este entorno marcó a Valverde desde temprana edad: su apodo “Tony” hace referencia al personaje central de la película Caracortada, así como a su admiración por figuras del narcotráfico como Pablo Escobar.
En 2018, su padre fue asesinado a balazos, según confirmó el diario La República. Tras el crimen, Valverde expresó en su cuenta de Facebook, cuando tenía solo trece años, que buscaría venganza. Estos antecedentes delinearon el camino delictivo que lo llevó a convertirse en uno de los fugitivos más buscados en Perú.
Sin embargo, su familia no ha sido ajena a estos caso, debido a que sus tíos también estarían vinculados a organizaciones criminales. Valverde no cuenta con antecedentes en el Perú, pero en Argentina no es un desconocido en el mundo policial.
