La venta clandestina de animales silvestres continúa en pleno centro de Lima, donde especies como monos, tortugas, loros y serpientes aparecen en bolsas o cajas en los alrededores del jirón Ayacucho, contiguo a la sede principal del Ministerio Público. Según un informe de Panamericana Televisión, los operativos recientes de las autoridades han detectado animales en condiciones de hacinamiento y desamparo, en plena vía pública de la capital peruana.
De acuerdo con el reporte de Panamericana Televisión, un grupo familiar controla la comercialización de fauna silvestre en la zona, donde estos ejemplares son ofrecidos como mascotas, en explícita contravención de las normativas nacionales e internacionales de protección animal. En imágenes difundidas por ese medio, personal de fiscalización halló “bolsas de rafia llenas de animales silvestres como loros, tortugas y monos”, según confirmó una autoridad local.
Walter Huayllani, juez penal especializado de Lima, explicó a Panamericana Televisión que el traslado y almacenamiento de los animales resulta especialmente perjudicial. “Los que traen este tipo de animales los colocan en cajas, los colocan en bolsas, sin la debida oxigenación, sin los alimentos, sin el agua. Y muchas veces creemos que las condiciones que nosotros podemos darles a estos animales son las mejores para ellos cuando no es así. Es un acto de crueldad“, declaró Huayllani.

La gerenta de fiscalización municipal detalló al mismo medio que la captura y venta de estas especies configura un delito bajo la legislación vigente. “Eso constituye un delito. Eso son animales que, efectivamente, no es su hábitat y encima en las condiciones que las tienen. La pena es mayor hasta tres años. Ya estamos haciendo la denuncia correspondiente en la comisaría de San Andrés“, sostuvo la funcionaria, según recogió Panamericana Televisión.
El juez Huayllani precisó que las penas pueden resultar mayores si se evidencia organización criminal en el tráfico de animales. “Si bien nos puede parecer que la pena es mínima de tres a cinco años, pero existe esa cadena de actos que puede ingresar dentro del espacio del crimen organizado. Y, evidentemente, la pena ahí es de 8 a 15 años”, afirmó el magistrado a Panamericana Televisión.
La persistencia de este comercio ilegal en las cercanías de las instituciones encargadas de la legalidad nacional subraya los desafíos que enfrenta Perú en la protección de su fauna silvestre. Las autoridades continúan los esfuerzos para identificar a los responsables y procesarlos penalmente bajo los marcos vigentes.

Las especies afectadas y que están combatiendo —a través de acciones de protección, decomiso y campañas de sensibilización— el tráfico ilegal de fauna silvestre en Perú incluyen:
- Otorongo (jaguar)
- Tortuga taricaya
- Iguana
- Rana gigante del lago Titicaca (Telmatobius culeus)
- Mono fraile
- Mono choro
- Mono tití
- Loro
- Guacamayo
- Pihuicho
- Botón de oro
Peligro para la salud
El Ministerio de Salud (Minsa) advirtió a la población sobre el peligro que representa criar animales silvestres como mascotas. La institución recomendó entregar estas especies a la autoridad sanitaria, ya que pueden transmitir enfermedades graves como la rabia. De acuerdo con declaraciones del Dr. Luis Oliva Cerna, especialista de la Dirección General de Salud Ambiental (Digesa) del Minsa, especies como monos, osos, ardillas, tigrillos y zorros son reservorios del virus de la rabia y pueden representar un riesgo mortal para las personas.
El Minsa informó que en el distrito limeño de Ate, tras registrarse un caso de rabia en un mono “Machín”, se intervino cerca de mil viviendas y se encontraron tres monos cuyos dueños se negaron a entregar. El trabajo incluyó visitas casa por casa en coordinación con el municipio de Ate Vitarte y organizaciones comunitarias. Con el apoyo del Instituto Nacional de Recursos Naturales (Inrena), se recogieron tres monos adicionales.
La Dra. Ana María Navarro Vela señaló que algunos monos pueden pasar de ser juguetones a agresivos por enfermedades desconocidas. El Minsa enfatizó que la Organización Mundial de la Salud (OMS) desaconseja la tenencia de animales silvestres en casa. En caso de mordedura, se debe acudir inmediatamente a un centro de salud y notificar a las autoridades sanitarias.