Una iniciativa virtual logró viralizarse entre jóvenes peruanos: recrear el incendio del Congreso en Roblox, inspirados por los recientes sucesos ocurridos en Nepal e Indonesia, donde manifestaciones masivas concluyeron con parlamentos incendiados y numerosas víctimas. La idea surgió como un canal para expresar indignación frente a decisiones políticas percibidas como injustas.
Roblox se presenta como más que un simple juego; es un espacio donde los jóvenes manifiestan simbólicamente su frustración. La plataforma permite construir mundos, interactuar con otros y representar situaciones reales, como protestas o enfrentamientos, sin temor a repercusiones legales.
Los participantes buscan reflejar sus demandas y críticas hacia la política nacional. Dentro de este entorno, los manifestantes crean avatares, recrean edificios oficiales y simulan enfrentamientos con policías y congresistas, lo que les permite proyectar sus reclamos de forma creativa y segura.
Congreso arde en Roblox
Las imágenes circularon a través de la cuenta oficial de TikTok de Peru City, un juego creado por Toxoponga en la plataforma Roblox. Se observa cómo los avatares de manifestantes enfrentan a policías y militares frente al Congreso virtual, apodado ‘Chongreso’, mientras algunos congresistas intentan escapar de los disturbios.

El mensaje al pie de la publicación destaca el propósito simbólico de la acción: “¡El pueblo toma justicia en Peru City: ¡Ande el Congreso!”. Los usuarios coordinan acciones, simulan incendios y enfrentamientos para mostrar su rechazo a decisiones legislativas recientes y su malestar con la clase política.
Junto a manifestantes y autoridades virtuales, se perciben interacciones entre jugadores que reflejan la organización y planificación existente detrás de esta recreación. Roblox funciona como un espejo digital de la protesta, donde los jóvenes proyectan sus emociones y exigencias.
¿Cómo los jóvenes toman ejemplo de Nepal e Indonesia para protestar?
Este fenómeno tiene antecedentes internacionales. El 9 de septiembre en Nepal, manifestantes incendiaron el Parlamento en Katmandú tras la censura en redes sociales y la corrupción sistémica. El hecho causó la renuncia del primer ministro Khagda Prasad Sharma Oli y más de setenta fallecidos, mientras Sushila Karki asumió como primera ministra interina por votación en Discord.
De forma similar, en agosto en Indonesia, localidades como Makassar en la isla de Célebes vivieron protestas que terminaron con el incendio del Parlamento Regional (DPRD). El saldo fue de tres muertos y cinco heridos, tras exigir cambios frente a elevados subsidios legislativos y muertes ocurridas durante la represión policial. Otros edificios oficiales en Surabaya, Pekalongan y Cirebon también sufrieron daños, ocasionando pérdidas estimadas en USD 53 millones.
Estos antecedentes funcionan para los jóvenes peruanos como referencia de protesta extrema ante decisiones políticas consideradas injustas, entre ellas reformas previsionales abusivas, leyes controvertidas y la falta de respuestas ante la inseguridad y corrupción. La recreación en Roblox simboliza la percepción de impunidad y desconexión de las autoridades.
Protestas de la Generación Z contra Dina Boluarte y la AFP
La Generación Z convocó movilizaciones en Lima los días 20 y 21 de septiembre durante el “Día del Despertar Peruano”. Los manifestantes se reunieron en la Plaza de Armas con el objetivo de marchar hacia el Congreso y visibilizar sus demandas ante las autoridades.
Entre los reclamos principales figuran: respeto al derecho a la protesta y justicia para las dieciocho víctimas de las manifestaciones de enero de 2023 en Juliaca; reformas profundas al sistema de pensiones, con críticas a la Ley N.º 32123; acciones efectivas para combatir la delincuencia; y la vacancia de la presidenta Dina Boluarte, a quien acusan de agravar la crisis política.
La combinación de protestas presenciales y acciones en Roblox demuestra cómo la Generación Z encuentra distintos espacios para expresar su descontento. Mientras las movilizaciones físicas buscan una presión directa sobre las autoridades, el entorno virtual amplifica sus voces, permitiendo representar simbólicamente demandas de forma segura y creativa.
Esta dualidad entre protesta en las calles y recreación digital forma parte de una tendencia creciente: los jóvenes integran tecnología, redes sociales y videojuegos para involucrarse activamente en debates políticos y sociales, transformando la manera en que se entiende la movilización ciudadana en Perú.