
La mañana de este jueves 11, cerca de 160 agentes penitenciarios ingresaron al penal El Milagro de Trujillo en un operativo de control que tuvo como objetivo incautar artículos prohibidos dentro de las celdas. La intervención, que inició alrededor de las 7:30 a.m., estuvo a cargo de miembros del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), junto a personal de seguridad de las oficinas regionales de Huancayo, San Martín y Huánuco.
Durante la requisa se encontraron celulares, cargadores, chips, manuscritos con números telefónicos y dosis de droga, elementos que, de acuerdo con inteligencia penitenciaria, podrían ser usados por internos para coordinar actividades ilícitas como extorsiones y secuestros.

El operativo se ejecutó en los pabellones 5, 6, 9 y 14 del establecimiento penitenciario, incluyendo revisiones en patios, pasadizos, cocinas, así como inspecciones corporales a los internos. La acción fue dirigida por el director de Seguridad Penitenciaria del INPE, Alex Samamé Peña, y contó con la presencia de cuatro fiscales de Prevención del Delito de Trujillo.
Bandas en la mira
Según información oficial, las autoridades penitenciarias manejan reportes sobre la posible reactivación de organizaciones criminales al interior de los penales, como Los Pulpos, Los Injertos del Norte, Los Compadres y La Jauría Nueva Generación. Estas agrupaciones, de acuerdo con inteligencia del INPE, estarían utilizando equipos de comunicación y contactos externos para mantener actividades delictivas incluso desde la prisión.

Ante esta situación, se anunció que los internos que resulten involucrados serán trasladados a penales de máxima seguridad y en zonas alejadas de sus entornos familiares, con el fin de limitar su capacidad de comunicación y control externo.
Intensificación de controles
El presidente del Consejo Nacional Penitenciario, Iván Paredes Yataco, dispuso en los últimos meses la intensificación de las requisas en todos los penales del país. Según cifras oficiales, este tipo de operativos se han incrementado en 23 % y 41 % respecto a julio y agosto de 2024, respectivamente.
La medida se enmarca en la estrategia denominada “Alto a las Extorsiones”, cuyo propósito es cortar las redes delictivas que operan desde los centros penitenciarios y que afectan directamente a comerciantes, transportistas y ciudadanos en diferentes regiones del país.

En el operativo de Trujillo también participaron el director de la Oficina Regional Norte Chiclayo, Antonio Coronado Sánchez; el jefe del GOES, Sergio Haro Huapaya; y el director del penal de varones de Trujillo, Wilson de la Torre Valderrama.
Contexto regional
La ciudad de Trujillo, capital de La Libertad, se ha visto golpeada en los últimos meses por atentados y extorsiones presuntamente coordinadas desde penales. Por ello, el control de objetos prohibidos dentro de las cárceles se ha convertido en un eje de trabajo conjunto entre el INPE, la Policía Nacional y el Ministerio Público.
De acuerdo con datos de seguridad ciudadana, en esta región se registran altos índices de denuncias por extorsión, un delito que en muchos casos tiene como origen las comunicaciones realizadas desde establecimientos penitenciarios.