La aplicación de una tarifa adicional en el aeropuerto internacional Jorge Chávez generó debate entre pasajeros y aerolíneas. La medida corresponde a la Tarifa Unificada de Uso de Aeropuerto (TUUA) para viajeros en tránsito internacional, cuyo cobro provisional fue fijado por el Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositrán).
Lima Airport Partners (LAP), concesionaria del terminal aéreo, aclaró que no se trata de una imposición propia, sino de una disposición regulatoria que establece un monto temporal hasta que se apruebe una tarifa definitiva. La compañía sostuvo que los ingresos derivados de este cobro se reparten entre el concesionario y el Estado, con el fin de financiar el mantenimiento del aeropuerto y proyectos de conectividad en el interior del país.
¿Qué implica la nueva tarifa?
Según lo autorizado por Ositrán, el monto provisional de la TUUA de transferencia internacional asciende a 12,67 dólares, incluido el IGV. Esta tarifa se aplica únicamente a los pasajeros que llegan en un vuelo internacional y continúan hacia otro destino internacional sin salir del aeropuerto Jorge Chávez.

El cobro no alcanza a los usuarios que realicen conexiones con rutas nacionales. La medida se implementó como parte de las obligaciones contractuales de la concesión, que establece que la empresa debe compartir un porcentaje de los ingresos obtenidos por este concepto con el Estado peruano.
Distribución de los recursos
De acuerdo con lo explicado por representantes de LAP, el 46,5 % de lo recaudado por esta tarifa se transfiere al Estado, que destina esos fondos a un fideicomiso orientado a financiar aeropuertos regionales. El porcentaje restante queda bajo la administración del concesionario para cubrir gastos de operación y mantenimiento.
Con esta estructura, la empresa precisó que los recursos no son destinados íntegramente a sus arcas. Una parte relevante se canaliza hacia proyectos que buscan fortalecer la infraestructura aeroportuaria en provincias, lo que permite la continuidad de obras y mejoras fuera de la capital.
Posición de las aerolíneas

Distintas asociaciones de aerolíneas manifestaron su desacuerdo con la implementación de esta tarifa, al considerar que representa un costo adicional para los pasajeros internacionales que realizan conexiones en Lima. Según indicaron, la medida podría reducir la competitividad del aeropuerto Jorge Chávez frente a otros centros de conexión en la región.
Ante estas críticas, LAP reiteró que el cobro no constituye una decisión unilateral, sino un mandato regulatorio del organismo supervisor. Enfatizó además que la tarifa es temporal y que el monto definitivo será evaluado en un proceso que incluye la participación de distintos actores del sector aéreo.
Señalamiento de la concesionaria
Durante una presentación pública, voceros de LAP subrayaron que la empresa tiene la obligación de compartir sus ingresos con el Estado, lo que incluye los recursos derivados de la TUUA de transferencia. El mecanismo contractual establece que parte de esos fondos contribuyen directamente al financiamiento de la red aeroportuaria nacional.

La compañía indicó que continuará cumpliendo con las disposiciones establecidas en el contrato de concesión y con las directrices de Ositrán. Al mismo tiempo, se comprometió a mantener informados a los usuarios sobre la evolución del proceso que definirá la tarifa final.