La huelga nacional de enfermeras en EsSalud ha provocado la suspensión masiva de atenciones médicas y cirugías en hospitales de Lima y diversas regiones, dejando a miles de pacientes sin posibilidad de recibir atención oportuna. Los pacientes, quienes dependen del sistema, deben soportar extensos períodos de espera, ya que muchos turnos programados terminan reprogramados de manera indefinida por la falta de personal.
Panamericana evidenció el caso de Delia Mendoza, quien esperó ocho meses por una cirugía en el hospital Ramón Castilla. El mismo día que sería intervenida, solo tuvo la noticia que se deberá aplazar más tiempo poniendo en riesgo su salud, pero sin una nueva fecha definida.
“Me van a reprogramar, todavía no me reprograman. No sé para cuándo”, explicó Mendoza sobre la incertidumbre en que se encuentran miles de asegurados en la capital.

El mismo escenario se repite en el hospital Naylamp de Chiclayo, donde padres reclaman por la falta de programación en pediatría, e incluso en el hospital Ramiro Prialé de Huancayo, donde los turnos se postergan semanas o meses, con pacientes que se presentan puntualmente solo para recibir la noticia de que no podrán ser atendidos.
Estos pacientes solo conocen la palabra “espera” o “reprogramación” ante los diversos intentos de ser atendidos por los médicos.
Huelga de enfermeras indefinida
De acuerdo con gremios de salud, la protesta responde a demandas como la mejora en la infraestructura hospitalaria, equipos médicos propios y condiciones laborales dignas, peticiones que involucran a once sindicatos y representan a más del 60 % de los trabajadores del sistema.
“Lo que estamos demandando, en primer lugar, es trato digno para los asegurados. Mejoramiento de la infraestructura hospitalaria, adquisición de equipos propios”, indicó un vocero sindical sobre el impacto nacional de la huelga.

Las dificultades se agravan por el uso inadecuado de recursos humanos y la carencia de equipamiento, lo que contribuye al aumento sostenido de la brecha en la atención. Mientras el sistema público permanece colapsado, se destinan más de nueve millones de soles anuales al seguro de salud de congresistas y sus familias, un contraste que alimenta la indignación social entre quienes esperan por una consulta básica en hospitales desbordados.
A través de un comunicado oficial, la institución informó que el Ministerio de Trabajo declaró improcedente la huelga y aseguró haber implementado las acciones necesarias para intentar garantizar la atención de los pacientes a nivel nacional.
De la misma forma, el presidente de EsSalud, Segundo Acho Mego, aseguró que la institución continúa realizando esfuerzos para mantener la atención a los asegurados en todo el país, a pesar de la paralización impulsada por un sector de enfermeras.
Según explicó, la entidad habilitó canales alternativos para que los usuarios afectados por la huelga puedan reagendar sus citas médicas. El funcionario agregó que la dirección de recursos humanos de EsSalud sostuvo reuniones previas con los representantes sindicales y se alcanzaron algunos consensos, aunque el paro se concretó debido a demandas vinculadas a mejoras laborales.
Además, la doctora Estela Malaver, vocera de EsSalud de La Libertad, afirmó que la institución “se solidariza y comprende el malestar que generan los diferimientos de citas”. Señaló que la entidad reconoce la gravedad de la situación denunciada por los usuarios.