
El ministro del Interior, Carlos Malaver, reconoció que su reciente afirmación sobre extrañar a “nuestros delincuentes” no fue adecuada, en el contexto de la creciente ola de violencia y criminalidad que afronta el país. Explicó que su intención era utilizar una metáfora al señalar que la criminalidad extranjera tiene características más violentas.
“Quise aplicar una metáfora, quizá no fue la más apropiada en el momento. Pero lo que quise precisar era que la criminalidad extranjera ha llegado o ha implementado una gran violencia y un desprecio total por la vida humana en nuestro país”, expresó en entrevista con RPP.
“(Ello), con sus diversas modalidades, ya sea en la trata de personas, en la extorsión, en el cobro de cupos, porque han estado ingresando en todas esas plantillas que ya estaban con anticipación diseñadas y que el comportamiento criminal quizás era otro. Lo que quería precisar es que la violencia se ha visto incrementada en niveles muy alarmantes debido a un factor principal de la presencia de extranjeros en nuestro país", agregó, y subrayó que la violencia y los homicidios muestran un alza importante en comparación con los años previos: "existen entre 35 y 40 homicidios más respecto al año anterior".
Como se recuerda, en declaraciones anteriores remarcó que ahora “primero te disparan o te matan para después quitarte tu patrimonio”, un cambio respecto a patrones delictivos pasados. “Como lo dijo en algún momento un oficial de la Policía: ‘Esa gente es irrecuperable’”, declaró.
Mencionó que cada periodo histórico ofreció amenazas distintas. En los años 60 predominaba la vigilancia policial, durante los 70 y 80 el terrorismo y en los 90 los secuestros y asaltos a bancos. Actualmente, los factores principales son los homicidios, la extorsión, el sicariato y el tráfico ilícito de armas. Advirtió que la llegada de organizaciones criminales extranjeras introdujo modalidades delictivas inéditas en el país, como la trata de personas, el cobro de cupos y otras fórmulas de extorsión.
Asimismo, dijo que la Policía Nacional del Perú (PNP) enfrenta restricciones importantes debido a la falta de armamento, vehículos e infraestructura, aunque resaltó el esfuerzo de los agentes en la lucha contra la criminalidad. Indicó que el Gobierno entregó armamento adicional en zonas como el VRAEM y Pataz, ambas declaradas en emergencia, pero consideró que el soporte sigue sin satisfacer la realidad que impone la criminalidad organizada.
Abordó además el reciente asesinato de un conductor de transporte público en Lima, hecho que motivó la coordinación con el Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) y los gremios del sector para reforzar la seguridad. Entre las iniciativas a implementar, mencionó operaciones aleatorias y el despliegue de tecnología de monitoreo en tiempo real. A pesar de ello, reconoció atrasos normativos que impiden la instalación de cámaras de vigilancia a bordo de los vehículos de transporte público.
Frente a cuestionamientos por una supuesta falta de coordinación con el Ministerio Público, el ministro afirmó estar dispuesto a reunirse con la fiscal de la Nación, Delia Espinoza, con el objetivo de mejorar los esfuerzos conjuntos contra la inseguridad.