Este es el superalimento andino que regula el azúcar, combate el envejecimiento y fortalece la salud integral

Este fruto andino es fuente de vitaminas, minerales y fibra, lo que lo convierte en un complemento nutritivo para la alimentación diaria, según análisis nutricionales publicados

Guardar
El fruto andino aporta carbohidratos
El fruto andino aporta carbohidratos complejos, fibras, betacarotenos y minerales como el hierro y el potasio, elementos que contribuyen al equilibrio metabólico y a la protección celular en diferentes etapas de la vida (Andina)

La lúcuma, fruto originario de los Andes peruanos, ha conquistado un lugar privilegiado en la gastronomía y la nutrición mundial. Su sabor dulce y suave se combina con un perfil nutricional rico y equilibrado, que aporta fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes.

Gracias a estas propiedades, su consumo se asocia a beneficios que van desde la regulación de la glucosa en sangre hasta la prevención del envejecimiento prematuro y la protección cardiovascular.

Además, su versatilidad la convierte en un ingrediente apreciado en postres, batidos y suplementos naturales. Hoy, su creciente demanda en países como Chile y Estados Unidos confirma que este superalimento andino trasciende fronteras.

Regulación de la glucosa y bienestar emocional

Consumir lúcuma beneficia el metabolismo
Consumir lúcuma beneficia el metabolismo al evitar picos de glucosa y aporta compuestos que ayudan a reducir la ansiedad, regulando el estado de ánimo y la energía diaria. (Freepik)

Una de las principales cualidades de la lúcuma es su bajo índice glucémico. Esto significa que su consumo no provoca aumentos bruscos en los niveles de azúcar en la sangre, lo que la convierte en un alimento ideal para quienes padecen diabetes o buscan mantener estable su metabolismo. Además, su alto contenido en fibra soluble ayuda a ralentizar la absorción de glucosa, lo que mejora la respuesta del organismo después de las comidas y favorece el equilibrio energético.

La fruta también se destaca por sus compuestos bioactivos, entre los que resaltan la niacina (vitamina B3) y los polifenoles, conocidos por su efecto positivo sobre el sistema nervioso. Estos nutrientes estimulan la producción de serotonina, la hormona vinculada a la sensación de bienestar, y contribuyen a disminuir la ansiedad y el estrés.

Cada vez más investigaciones vinculan el consumo de lúcuma con el mantenimiento del equilibrio emocional y la reducción de factores que desencadenan trastornos como la depresión. Así, este fruto no solo favorece la salud física, sino que también influye en la estabilidad mental, posicionándose como un aliado integral del bienestar.

Antioxidantes, salud cardiovascular y prevención del envejecimiento

Los antioxidantes de la lúcuma
Los antioxidantes de la lúcuma frenan el daño oxidativo, retrasan el envejecimiento y fortalecen la salud cardiovascular, previniendo riesgos asociados a la circulación sanguínea. (Freepik)

La lúcuma es rica en antioxidantes naturales, entre ellos betacaroteno, niacina y compuestos fenólicos, que combaten los radicales libres responsables del daño celular. Este efecto protector ayuda a retrasar el envejecimiento prematuro, previene el deterioro de tejidos y mejora la elasticidad de la piel.

Su consumo frecuente también beneficia la salud cardiovascular. La niacina, presente en altas concentraciones, ayuda a regular los niveles de colesterol, incrementando el colesterol bueno (HDL) y reduciendo el colesterol malo (LDL) y los triglicéridos. Estos efectos favorecen el correcto funcionamiento del sistema circulatorio y reducen el riesgo de enfermedades coronarias.

El potasio, otro de sus minerales esenciales, interviene en la regulación de la presión arterial, previene el endurecimiento arterial y disminuye la probabilidad de sufrir infartos o accidentes cerebrovasculares. Además, su aporte de hierro y fósforo contribuye a la producción de glóbulos rojos y a la oxigenación de los tejidos, factores clave para mantener la vitalidad general.

Al ser una fuente importante de antioxidantes y micronutrientes, la lúcuma se ha consolidado como un aliado natural contra el envejecimiento celular y las enfermedades degenerativas. Su integración en dietas balanceadas permite proteger órganos vitales, reforzar defensas y mantener el organismo en óptimas condiciones.

Valor nutricional y proyección internacional

La lúcuma ofrece un equilibrio
La lúcuma ofrece un equilibrio ideal entre nutrición y sabor. Rica en antioxidantes, vitaminas y minerales, ha conquistado mercados como Chile y Estados Unidos por su potencial saludable. (Andina)

La lúcuma es un verdadero tesoro nutricional. Aporta vitaminas A, C, E y varias del complejo B, esenciales para funciones metabólicas y la regeneración celular. Además, contiene minerales como calcio, fósforo, magnesio y zinc, que contribuyen al fortalecimiento óseo, el desarrollo muscular y la mejora del sistema inmunológico.

Por su densidad nutricional, la lúcuma es recomendada para combatir la anemia, la desnutrición y el cansancio crónico. La combinación de hierro, proteínas vegetales y antioxidantes favorece la recuperación del organismo, mientras que su sabor naturalmente dulce la convierte en una alternativa saludable al azúcar refinada.

La industria alimentaria y la cosmética han reconocido el potencial de este superalimento. En gastronomía, se utiliza en helados, batidos, postres y suplementos energéticos. En el ámbito cosmético, sus antioxidantes son aprovechados para la elaboración de mascarillas y productos para el cuidado de la piel, debido a sus propiedades regenerativas y protectoras.

El mercado internacional ha respondido a estos beneficios con un aumento sostenido en la demanda. Países como Chile y Estados Unidos figuran entre los principales destinos de exportación, gracias a la creciente preferencia de consumidores que buscan productos naturales con alto valor funcional. Esto posiciona a la lúcuma como un ingrediente de proyección global y refuerza su papel como embajadora de la biodiversidad peruana.

La lúcuma, conocida por los antiguos incas como “el oro de los Andes”, es hoy un símbolo del potencial alimentario y terapéutico del Perú. Su equilibrio entre sabor, nutrición y beneficios para la salud la ha convertido en un referente dentro de la tendencia hacia dietas más saludables y sostenibles. El interés internacional y la investigación científica respaldan su posición como uno de los superalimentos más valiosos del continente.