La noche del jueves 4 de septiembre, cerca de las 10:45 p. m., un fuerte estruendo sacudió la tranquilidad de la urbanización Las Quintanas, en Trujillo. El estallido, producido por un artefacto explosivo colocado en la fachada de una vivienda ubicada en la calle Lizarzaburu, frente al parque Perpetuo Socorro, provocó destrozos en varias casas y vehículos cercanos.
Aunque no se reportaron víctimas mortales, el impacto generó pánico entre los residentes, muchos de los cuales escucharon el estallido incluso en distritos vecinos como La Esperanza, Moche, Florencia de Mora y Huanchaco.
Las cámaras de seguridad de la zona, difundidas por Latina Televisión, registraron el momento en que un sospechoso deja el explosivo frente al domicilio y luego huye corriendo. El inmueble atacado estaba deshabitado desde hacía semanas, pero los vecinos aseguran que en el pasado recibía vehículos de lujo y que la propietaria habría recibido amenazas antes de abandonarlo.
Reacciones de las autoridades y vecinos

El alcalde de Trujillo, Mario Reyna, cuestionó la falta de firmeza del Gobierno frente a los ataques con explosivos, que en las últimas semanas se han repetido en la ciudad.
“No estamos todavía libres de estas organizaciones criminales que se disputan territorios. Tiene que haber mano dura de parte del Estado. Un Estado vacilante no ayuda en nada a la seguridad ciudadana. Aquí lo que debe hacerse es aprobar penas más drásticas para estos criminales”, declaró.
Reyna añadió que la ciudadanía no puede seguir viviendo bajo la amenaza de atentados y planteó la necesidad de un trabajo articulado entre la presidenta, el Congreso y el resto de autoridades para enfrentar la criminalidad organizada.
Los vecinos, por su parte, relataron el miedo que sienten tras el ataque. Una moradora de la zona dijo: “Siempre ha sido tranquilo y bonito por acá. Ahora ya no se puede vivir con esta inseguridad”.
Detención de los presuntos responsables

Tras el atentado, el Ministerio del Interior informó que la División de Investigación Criminal (Divincri) Trujillo capturó a Nilton Isaías Ravello Ramos (19) y Everet Emilio Quintero Monasteridos (32), ambos ciudadanos venezolanos. Durante la intervención, la Policía incautó una motocicleta que los detenidos habrían intentado usar para huir luego de la detonación, pero no lograron encenderla a tiempo.
Posteriormente, fue arrestado Fabrizio Manuel Leiton Gutiérrez (22), alias “Pelado”, señalado como la persona que habría encargado la colocación del explosivo. Según las declaraciones iniciales de los primeros detenidos, este sujeto los contactó para ejecutar el ataque y coordinó con ellos un reconocimiento del lugar el mismo 4 de septiembre en horas de la mañana.
La Policía continúa con las investigaciones para determinar los móviles del atentado y las posibles conexiones de los detenidos con bandas criminales que operan en la región.
Tercer atentado en menos de un mes

Este hecho se suma a otros dos atentados registrados recientemente en la ciudad, uno de ellos ocurrido en la avenida Perú, a solo unos minutos de Las Quintanas, lo que genera preocupación entre los vecinos porque los ataques ya no se limitan a zonas periféricas, sino que alcanzan urbanizaciones residenciales cercanas al centro histórico de Trujillo.
Los especialistas de la Policía y del Servicio de Atención Móvil de Urgencia (SAMU) atendieron de inmediato la emergencia, mientras brigadas de bomberos y personal de Defensa Civil realizaron evaluaciones para verificar la seguridad de las viviendas afectadas.
El alcalde de Trujillo insistió en que se requieren sanciones ejemplares para quienes utilizan explosivos con fines criminales. “Ya están capturados, pero ¿qué va a pasar? ¿Los van a liberar o saldrán del penal más especializados en delinquir? La ciudadanía necesita respuestas claras y acciones firmes”, expresó.