La Vía Expresa Sur, uno de los proyectos viales más ambiciosos de Lima, concluirá su primera etapa este domingo 7 de septiembre, pero por ahora no operará como una vía expresa tradicional. Lech Espinoza Arteaga, gerente central de infraestructura de la Empresa Municipal de Apoyo a Proyectos Estratégicos S.A. (Emape), confirmó que las vías principales y auxiliares funcionarán íntegramente a nivel, con cruces semaforizados y sin pasos a desnivel, una solución transitoria mientras continúan los trabajos para ejecutar los intercambios viales previstos.
Solo vías a nivel y semáforos en los cruces
El proyecto, que abarca un tramo de cinco kilómetros entre República de Panamá y la Panamericana Sur, tendrá seis cruces regulados por semáforos y sin infraestructura de pasos elevados ni deprimidos en esta fase. Espinoza Arteaga detalló a Canal N que “los pasos, las intersecciones que son seis, las vamos a dejar a nivel, pero estamos trabajando en estudios, ya tiene contrato, ya tiene una consultora, (para los) pasos a desnivel”. Según explicó, la ejecución inicial de la obra priorizó la transitabilidad tras la liberación física y legal de los predios ocupados que impedían el avance del proyecto.
La construcción de dos viaductos —en los cruces con las avenidas República de Panamá y Panamericana— y cuatro pasos medianeros en Castellana, Surco, Próceres y Ayacucho, aún se encuentra en etapa de evaluación y estudio. El gerente de infraestructura de Emape estimó que la implementación completa de estos pasos a desnivel finalizará en junio próximo.

Pavimentación, estaciones del Metropolitano y logística
El tramo habilitado contará con tres carriles por sentido para vehículos privados y un espacio reservado en el centro de la vía exclusiva para el Metropolitano, sistema de transporte masivo que eventualmente llegará hasta San Bartolo y permitirá conectar Lima centro con los distritos del sur. Espinoza informó: “Acá tiene el espacio para el Metropolitano y dentro del proyecto también se está considerando todas las estaciones en todos los intercambios viales que los he mencionado”. Está previsto que este tramo cuente con seis estaciones del Metropolitano a lo largo de los cinco kilómetros.
En cada carril, mil cien metros cúbicos de concreto se vacían cada día, tras el arribo de cerca de 125 camiones diarios. Este ritmo ha permitido avanzar hasta cuatro cuadras diarias en ambas direcciones y concluir a tiempo la pavimentación para la fecha comprometida. Tras la aplicación del concreto, las cuadrillas completan el proceso con señalización, instalación de muros jersey prefabricados y la respectiva semaforización. El responsable de Emape precisó: “Luego de que el domingo acabemos la pavimentación, lógico, todavía vamos a colocar muros jersey, señalización incluida”.

Obstáculos legales y coordinación institucional
El avance del proyecto estuvo precedido de un proceso de saneamiento físico-legal, que incluyó la liberación de terrenos invadidos y la resolución de controversias que obstaculizaban el trazo de la vía. Esta situación derivó, en semanas previas, en disputas entre la Municipalidad Metropolitana de Lima y el Ministerio de Transportes, tras el anuncio de multas y denuncias de “acoso político”, situación que aún se encuentra en proceso de evaluación administrativa. Emape asegura contar con un equipo técnico encargado de los trámites para garantizar la continuidad y conclusión programada de la obra.