
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) ejecutó un operativo en el pabellón N.° 2 de máxima seguridad del penal de Iquitos, en Loreto, que terminó con la incautación de 18 celulares, 11 cables USB, 11 paquetes de droga y un módem WiFi. Las autoridades señalaron que estos objetos eran utilizados para coordinar extorsiones desde prisión, un problema que afecta la seguridad ciudadana en varias regiones del país.
La intervención se desarrolló la madrugada del lunes, con la participación de 30 agentes penitenciarios, quienes revisaron exhaustivamente celdas, pasadizos, servicios higiénicos, cocinas y áreas comunes del establecimiento. La operación fue comunicada al Ministerio Público y a la Policía Nacional, que asumieron las diligencias correspondientes.
¿Qué pasará con los internos identificados?

El director de la Oficina Regional San Martín del INPE, César Magno Torre, precisó que, como medida correctiva, los cuatro internos hallados con celulares fueron trasladados a otro penal de mayor contención.
“Todos nuestros esfuerzos buscan fortalecer el principio de autoridad y contribuir a la seguridad ciudadana”, sostuvo.
El decomiso ha encendido alertas sobre los mecanismos que las mafias carcelarias utilizan para mantener el control desde dentro de los penales.
Política de cero tolerancia
La acción responde a la disposición del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Juan José Santiváñez, quien ordenó intensificar los operativos en cárceles de todo el país como parte de la política de “cero tolerancia” frente a los delitos organizados desde prisión.

El funcionario ya había señalado que los internos sorprendidos con objetos prohibidos serían reclasificados y enviados a establecimientos de máxima seguridad o con mayor control, a fin de cortar sus comunicaciones ilícitas.
A finales de agosto, esta estrategia permitió la ejecución de un megaoperativo en 68 penales a nivel nacional, en el que también se hallaron celulares, droga, chips y armas artesanales.
Tras la ola de incautaciones, el presidente del INPE, Iván Paredes Yataco, emitió un comunicado en el que aseguró que se “detendrán las extorsiones que se estén organizando desde las cárceles”. Añadió que las operaciones sorpresa serán permanentes y que se reforzará la seguridad en todos los establecimientos penitenciarios del país.
Extorsiones desde los penales

Las extorsiones carcelarias son un fenómeno que crece a la par de la criminalidad en las calles. Casos recientes lo demuestran. La Policía reportó que alias “Tito”, un interno del penal de Lurigancho, habría ordenado cobros a empresarios de transporte que cubren la ruta Lima–Callao. En paralelo, la semana pasada fueron detenidos siete internos del penal Sarita Colonia, acusados de liderar una red denominada “Los Yepes” que cobraba cupos desde dentro de sus celdas.
Aunque estas prácticas son cada vez más visibles, las cifras oficiales del INPE hasta marzo de este año apuntaron a que solo el 0,15% de las extorsiones en el país provenían de penales. Según las estadísticas, de las 19.000 denuncias registradas en 2023, apenas 21 fueron atribuidas a internos.
La captura de celulares y droga en penales de máxima seguridad revela que los reclusos continúan encontrando formas de mantener contacto con el exterior y sostener negocios ilícitos.