Mientras la presidenta Dina Boluarte anuncia la reapertura de la cárcel El Frontón, el megapenal de Ica, otro proyecto que se tenía en carpeta, sigue paralizado hace cinco años.
La obra inició en el 2018, en el distrito de Santiago. En un principio, fue concebida para albergar a 3.200 internos y reducir el grave problema de hacinamiento en las cárceles peruanas. Sin embargo, los trabajos continúan suspendidos y el complejo suma materiales deteriorados y un presupuesto que ya no responde a la inversión original.
“Es un penal que empezó su construcción en el año 2018 y se paralizó el 2020 por problemas ya de orden contractual entre el consorcio ganador y el Ministerio de Justicia. Por lo tanto, hay un perjuicio...“, declaró Luis Vila González, presidente de la Cámara de Comercio de Ica, en entrevista para Latina.
De acuerdo al medio, la falta de avances visibles y de servicios básicos como energía eléctrica, agua y desagüe, agudiza el panorama de un proyecto estancado, cuyo costo estimado se ha elevado de 380 a 640 millones de soles.

Demora prolongada e incertidumbre sobre servicios básicos
La paralización del megapenal de Ica responde a un litigio contractual entre el Ministerio de Justicia y el consorcio encargado del proyecto. Para Luis Vila González, el deterioro de materiales y la ausencia de servicios básicos agravan aún más la situación.
“Hasta donde sabemos no hay energía eléctrica, no hay agua, no hay desagüe. No sé cómo lo van a solucionar dado la rapidez que se requiere, en este caso, para habilitar el penal”, expresó.
Los recursos iniciales, que ascendían a 380 millones de soles, ya no serán suficientes para concluir la obra. Con los años de postergación y abandono, ahora se calcula que el presupuesto necesario ha crecido a 640 millones, reflejando el impacto del retraso y el deterioro de la infraestructura. El estado de abandono no solo agrava el problema del hacinamiento penitenciario, sino que genera incertidumbre para las autoridades locales y nacionales encargadas de la gestión carcelaria.

El Minjusdh promete reanudar obras, pero el plazo se alarga
En mayo de este año, el entonces titular del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos (Minjusdh), Juan Enrique Alcántara, aseguró que el expediente técnico del saldo de obra ya está listo y anticipó una posible reanudación de la construcción. “Este penal ya cuenta con un expediente técnico de saldo de obra y esperamos que a más tardar en julio podamos lanzar la convocatoria y así culminar, en el plazo aproximado de dos años, con la construcción de este penal y entregarlo al INPE”, informó durante una conferencia de prensa tras una sesión del Consejo de Ministros.
Alcántara destacó que existen planes para otros establecimientos penitenciarios, como los de Arequipa y Pucallpa, cuyas obras permitirán añadir 920 y 1.300 unidades de albergue, respectivamente. Pero enfatizó la urgencia de avanzar con la infraestructura penitenciaria ante la sobrepoblación. “La capacidad de los penales peruanos ronda aproximadamente 40 mil unidades de albergue; sin embargo, tenemos a más de 100 mil personas detenidas y es probable que este número siga aumentando por las acciones que viene realizando la Policía”, sostuvo.