
La noche del sábado 30 de agosto, Moisés Mere Ruiz, conocido como ‘Loco Mere’, fue asesinado a balazos mientras se encontraba dentro de su vehículo junto a su esposa y su hija de un año en el distrito de La Perla, Callao. El ataque se registró cuando la víctima, identificada como abogado vinculado a la organización Barrio King, se disponía a estacionar cerca de su vivienda. Pese a que vecinos auxiliaron al herido y lo trasladaron al Hospital Daniel Alcides Carrión, los médicos confirmaron su fallecimiento. Su esposa e hija resultaron ilesas.
La Policía Nacional del Perú (PNP) inició diligencias en el lugar de los hechos y recogió pruebas junto con personal del Ministerio Público. La investigación apunta a que el crimen estaría relacionado con un ajuste de cuentas ordenado por una organización rival, debido a que el abogado habría cumplido el rol de brazo legal de Barrio King, la red presuntamente liderada por Gerson Gálvez Calle, alias ‘Caracol’. Entre las principales hipótesis figura la intervención de sicarios que perpetraron el ataque justo al momento en que la presencia policial en la zona era reducida. Las autoridades solicitaron analizar las grabaciones de las cámaras de seguridad del distrito para identificar a los responsables.

Tercer abogado del ‘Caracol’ asesinado por sicarios
El asesinato de Moisés Mere Ruiz no es un caso aislado dentro de los círculos legales que rodean a ‘Caracol’. Otros abogados vinculados a la defensa del líder de Barrio King murieron en circunstancias similares, también víctimas de sicariato. Uno de estos casos fue el de Óscar Medelius Rodríguez, excongresista relacionado con el fujimorismo, quien falleció el 10 de febrero tras recibir al menos 20 disparos en un ataque perpetrado mientras se desplazaba en una camioneta por el distrito de Carabayllo.
Medelius resultó ser parte de la defensa del cabecilla sentenciado por tráfico ilícito de drogas y extorsión. El entonces ministro del Interior, Juan José Santiváñez, confirmó que “se trataría de un ajuste de cuentas, pues Medelius era abogado de ‘Caracol’ y de otros personajes vinculados al crimen organizado”. Sin embargo, según fuentes policiales del programa Ocurre Ahora, fue el propio cabecilla quien no estaba contento con el trabajo que venía haciendo en su defensa.
El criminal, sentenciado a 35 años de prisión, habría pagado por adelantado a Medelius una fuerte suma de dinero por su libertad. Sin embargo, el letrado no pudo conseguir que ‘Caracol’ salga de Challapalca en el plazo acordado. Hipótesis se sustenta en las escuchas realizadas a Gerson Gálvez por el Equipo Constelación de la PNP.
El patrón violento también afectó a Jaime Efren Coasaca Torres, quien asumió la defensa de Gerson Gálvez tras su paso como fiscal provincial. En octubre de 2017, dos sujetos abordo de una motocicleta abrieron fuego contra Coasaca cuando este salió de su domicilio en la urbanización La Inmaculada, Santiago de Surco, tras haber sido contactado días antes bajo el pretexto de una consulta jurídica. La esposa del letrado reveló que, desde finales de 2016, su esposo había dejado de defender a Gerson Gálvez debido a problemas por el incumplimiento en el pago de sus honorarios. La PNP confirmó que el crimen fue atribuido a una banda de sicarios a la que se pagó un monto superior a 50 mil soles para ejecutar el asesinato.
Las investigaciones policiales y periodísticas han coincidido en que estos crímenes comparten el factor común de la víctima: tres abogados que defendieron o representaron a ‘Caracol’ y a su organización. En todos los casos la modalidad delictiva incluyó ataques directos con armas de fuego en espacios públicos, lo que evidencia métodos de ajuste de cuentas característicos de estructuras criminales dedicadas al sicariato y la extorsión en el Callao y Lima.
¿Quién es ‘Caracol’?
Gerson Gálvez Calle, conocido como ‘Caracol’, es identificado por autoridades policiales como el cabecilla de la organización criminal Barrio King. Su banda ha sido vinculada con delitos como sicariato, narcotráfico, cobro de cupos y extorsión en el sector de la construcción civil, tanto en el Callao como en Lima. La justicia peruana lo sentenció a 35 años de prisión por tráfico ilícito de drogas y otros delitos, mientras que al núcleo duro de Barrio King se le atribuyen asesinatos como el de Wilbur Castillo y el atentado contra Gerald Oropeza.