Un motín registrado en el penal de Huacariz, en Cajamarca, alteró la rutina del sábado y puso en vilo a familiares, autoridades y a la comunidad local. La tensión se desató cuando, según información oficial, un grupo de internos del pabellón 5 tomó como rehenes a dos agentes de seguridad durante la mañana, en un contexto marcado por recientes episodios de violencia y denuncias de presuntos abusos.
La rápida intervención de las fuerzas del orden permitió restablecer el control, pero el incidente dejó al descubierto la fragilidad de la seguridad penitenciaria y la persistencia de reclamos no resueltos dentro del establecimiento. El episodio, que se produjo apenas dos días después de la muerte de un recluso en una gresca interna, generó alarma entre los familiares que aguardaban para ingresar al penal y entre los vecinos de la zona.
Testigos relataron que, tras ser alejados de la puerta principal, escucharon múltiples disparos y percibieron un fuerte olor a bombas lacrimógenas provenientes del interior del recinto. La situación motivó un despliegue inmediato de la Policía Nacional del Perú (PNP), que acordonó los alrededores para evitar incidentes mayores y garantizar la seguridad.
Comunicado del INPE

De acuerdo con el comunicado oficial del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), el motín se originó como respuesta a una revisión ordinaria de ambientes, en la que se buscaban objetos prohibidos, armas punzocortantes y licor. Los internos, al oponerse a la medida, retuvieron a los agentes de seguridad, lo que llevó a la autoridad penitenciaria a informar de inmediato al Ministerio Público y a la PNP.
El INPE indicó que la prioridad fue salvaguardar la integridad tanto de los agentes como de los internos y de las personas de visita en el penal, cuya seguridad se vio comprometida durante el incidente.
El operativo conjunto entre el INPE y la PNP permitió, hacia el mediodía, ejecutar el encierro de los internos involucrados y restaurar la calma en el pabellón. En el comunicado difundido, la institución precisó: “Aproximadamente al mediodía de hoy, personal del INPE y la PNP ejecutó el encierro de estos internos, restaurando totalmente la calma en el pabellón”. Las autoridades descartaron la existencia de fugas, fallecidos o rehenes al cierre de la intervención, aunque reconocieron que la situación generó inquietud entre los familiares y la comunidad.
Intervención de la Defensoría del Pueblo
La Defensoría del Pueblo acudió de inmediato al penal tras conocerse el motín, con el objetivo de escuchar el pliego de reclamos de los internos y trasladar sus demandas al director del establecimiento. En un mensaje dirigido a la opinión pública, la entidad informó: “En coordinación con la Fiscalía de Derechos Humanos, el 3 de septiembre habrá una reunión con INPE, la Fiscalía y delegados, donde participaremos de mediadores para garantizar un diálogo que evite nuevos hechos de violencia”. Además, la Defensoría exhortó a las personas privadas de libertad a mantener la calma y rechazar todo acto violento.
Mientras tanto, las investigaciones continúan para esclarecer los hechos y determinar las posibles fallas en el control de los pabellones. Las autoridades mantienen el despliegue de seguridad en el penal de Huacariz, a la espera de los resultados de las indagaciones y de la reunión programada entre las partes involucradas.