Las imágenes y testimonios recopilados en un informe del programa Ocurre Ahora de ATV revelan una preocupante realidad en distintos centros médicos estatales de Lima Sur: mientras los pacientes forman largas colas en busca de atención, el personal de salud, funcionarios y administrativos utilizan las instalaciones para celebrar cumpleaños, aniversarios y hasta fiestas patronales en pleno horario laboral. Situaciones que se han ido replicando a lo largo del año.
En el Centro de Salud Manuel Barreto, ubicado en el distrito limeño de San Juan de Miraflores, se registró una celebración de cumpleaños con torta, música, gaseosas y hasta vino. Lo alarmante es que médicos y enfermeras participaron de la fiesta aún con sus batas puestas y durante horas de trabajo.
Entre los asistentes se encontraba Iván Ángeles, entonces jefe de la Red Integrada de Salud de San Juan de Miraflores, quien fue grabado bailando mientras la crisis de infraestructura y equipamiento en los establecimientos de su sector se agudizaba.
En ese mismo centro, los trabajadores también celebraron con mariachis el aniversario número 38 de la institución. Todo ocurrió mientras los pacientes eran atendidos bajo techos con filtraciones y con equipos médicos inoperativos, como un ecógrafo que llevaba más de tres meses fuera de servicio.
La situación no se limita a un solo establecimiento. En el centro de salud Tablada de Lurín, la propia jefa de la Red Villa María del Triunfo fue grabada bailando al ritmo de una banda durante una fiesta patronal organizada en los pasillos del local, a pesar de que el techo del edificio se encuentra deteriorado por la humedad.
Funcionarios de la Dirección de Redes Integradas de Salud (Diris) Lima Sur también fueron captados participando en celebraciones. En su sede de Barranco organizaron una fiesta con orquesta en la que incluso se vio al director ejecutivo de Monitoreo y Gestión Sanitaria animando el evento. Para las Fiestas Patrias, se realizó otro festejo con buffet, globos y caporales, mientras los pacientes seguían enfrentando la falta de medicamentos y exámenes de laboratorio.
Pacientes en abandono
Mientras el personal festejaba, cientos de pacientes denunciaban el maltrato y la falta de atención oportuna. Muchos de ellos aseguraron que debieron pagar consultas particulares porque en los centros de salud no había especialistas, rayos X ni ambulancias operativas para emergencias.
“Vine varias veces a sacar cita, pero siempre me dicen que regrese al mes siguiente. Al final tuve que atenderme en otro lugar y pagar de mi bolsillo”, relató una paciente de la tercera edad de Villa María del Triunfo.
Hace dos semanas, en el Centro de Salud Trébol Azul, en San Juan de Miraflores, se registró otra celebración de cumpleaños organizada por el mismo personal que debería estar atendiendo a la población. Ese día, una emergencia tuvo que esperar porque la ambulancia estaba en reparación.
Cabe señalar que este tipo de situaciones, protagonizadas tanto por personal de salud como por funcionarios administrativos, reflejan una preocupante falta de empatía y respeto hacia los pacientes en un país marcado por la precariedad del sistema sanitario. Lamentablemente, estos hechos no son aislados y se han replicado en diversos establecimientos de salud a nivel nacional.
