La ex primera ministra Betssy Chávez cumple este martes su cuarto día en huelga de hambre seca en el penal Anexo de Mujeres de Chorrillos. La medida fue retomada el viernes 22 de agosto, luego de una tregua de 48 horas, debido a que el Instituto Nacional Penitenciario (INPE) no accedió a su pedido de traslado a otro centro penitenciario.
Chávez acumula más de dos semanas de protesta. En un inicio, se mantuvo 12 días en huelga de hambre, pero decidió suspenderla a pedido de sus familiares y abogados, así como por el compromiso del presidente del INPE de evaluar sus denuncias. La exministra aceptó una tregua, sin embargo, al no obtener respuesta, reinició la medida en modalidad de huelga de hambre seca, negándose tanto a consumir alimentos como agua.
Desde hace semanas, Chávez sostiene que es víctima de amenazas dentro del penal y que su vida corre peligro. Incluso denunció que en una ocasión durmió en las gradas del establecimiento, cubierta únicamente con una frazada. Estas declaraciones motivaron la preocupación del expresidente Pedro Castillo y de excongresistas de Perú Libre, como Guido Bellido y Guillermo Bermejo, quienes solicitaron garantías para su integridad.

En un comunicado difundido el 25 de agosto, el INPE informó que la exministra rechazó en dos oportunidades ser atendida por personal médico. De acuerdo con el pronunciamiento, se negó tanto a la evaluación inicial como al control de sus signos vitales, pese a haber sido advertida sobre los riesgos que enfrenta su salud.
Ante esta situación, la Defensoría del Pueblo y la Fiscalía de Prevención del Delito fueron notificadas para que evalúen una posible intervención en caso se determine que se vulneran los derechos fundamentales de la interna. No obstante, el INPE sostiene que no existen pruebas de amenazas o maltratos hacia Chávez y que su estado continúa siendo monitoreado.

¿Cuáles son sus reclamos?
La exministra ha solicitado su traslado a otro penal, petición que presentó junto a dos internas más, quienes también pidieron medidas de protección y la posibilidad de permanecer juntas.
En una nota difundida por su abogado, Raúl Noblecilla, se advierte que un médico del INPE alertó que, de continuar en huelga de hambre seca, Chávez podría fallecer en un plazo de tres días.
“Betssy Chávez sigue enfrentando a una dictadura corrupta y asesina. Si algo le sucede la responsabilidad será exclusiva de Dina Boluarte y de este régimen criminal”, publicó Noblecilla.
En el mismo pronunciamiento se incluyó un escrito de la exministra en el que asegura ser consciente de las consecuencias que la medida puede tener sobre su salud. Además, volvió a acusar a la directora del penal y a algunos internos de mantener presuntos vínculos con Sendero Luminoso y de hostigarla de manera constante.
Consecuencias en la salud de Betssy Chávez
El doctor Marco Almería, experto en salud pública, advirtió que la huelga seca es la protesta más peligrosa que existe, y quien la acata puede llegar a fallecer entre el cuarto y séptimo día.
“La huelga seca o la huelga de hambre seca es aquella en donde las personas no ingieren ni sólidos ni líquidos, es decir, no ingieren absolutamente nada. Es la más radical y la más peligrosa de todas las huelgas de hambre. (...) Las personas que hacen huelga de hambre seca, como el caso de Betssy Chávez, son personas que entre el día cuatro y el día siete, de acuerdo a las experiencias que hemos tenido en el pasado, fallecen”, señaló en Exitosa.
El doctor indicó que durante las primeras 48 horas, los síntomas suelen ser intensos pero no críticos: sed constante, hambre aguda, mareos, dolor de cabeza y una caída en la presión arterial.
Sin embargo, la situación se torna mucho más peligrosa a partir del día tres y cuatro, etapa en la que se encuentra actualmente Chávez.