Un grupo de delincuentes encapuchados y armados asaltó una casa de cambio ubicada en el sector de La Negrita (Arequipa) y se llevó un botín de 260 mil soles. Según las primeras investigaciones de la Policía Nacional (PNP), los sujetos habrían llegado desde Lima para ejecutar el golpe.
El asalto se produjo a plena luz del día. Según un reporte difundido por Buenos Días Perú, los delincuentes irrumpieron en la casa de cambio y apuntaron directamente a los trabajadores.
Las cámaras de seguridad registraron el ingreso de tres sujetos con pasamontañas. Uno amenazó a los dueños, otro custodiaba la entrada y el tercero exigía el dinero.
Con el botín en su poder, salieron del local y abordaron una camioneta negra que los aguardaba en la calle. La PNP desplegó un operativo e identificó el vehículo, reportado como robado en San Juan de Miraflores, Lima.

Las autoridades sospechan que se trata de una organización criminal que opera entre Lima y Arequipa. Cuatro personas fueron capturadas y quedaron a disposición del Ministerio Público. La policía confirmó que la banda viajó a Arequipa con el único propósito de ejecutar el robo.
Desalojo
En esta misma jornada, una casona ubicada a una cuadra y media de la Plaza de Armas de Arequipa fue escenario de graves disturbios durante un desalojo judicial ejecutado la mañana del lunes 25 de agosto. Al menos 15 personas, en su mayoría extranjeras y con el rostro cubierto, se atrincheraron en el inmueble para evitar la diligencia ordenada por el Poder Judicial tras un litigio de más de ocho años.
Los ocupantes bloquearon los accesos con piedras y llantas, y atacaron a la policía con bombas molotov, objetos contundentes y fuego. La intensidad del enfrentamiento obligó al cierre de calles céntricas y provocó un incendio que amenazó viviendas cercanas. El operativo, que se extendió por varias horas, movilizó a agentes antidisturbios, bomberos y personal judicial.
La PNP detuvo a nueve personas —cinco hombres y cuatro mujeres— acusadas de violencia y resistencia a la autoridad. Algunas intentaron huir por los techos, mientras otras llevaban a menores en brazos durante los ataques. Tres individuos resultaron heridos y fueron trasladados a centros de salud.
El inmueble, antes utilizado como discoteca clandestina, había sido alquilado para fines distintos y permanecía ocupado sin pago de renta desde hace años. El fuego fue controlado, pero la policía mantendrá vigilancia en la zona hasta que los bomberos descarten nuevos riesgos.