
El centro comercial Real Plaza de Trujillo volvió a ocupar la agenda pública esta semana, tras el encendido de sus luces exteriores. El hecho generó comentarios sobre un posible reinicio de actividades, aunque la Municipalidad Provincial aclaró que no existe ninguna solicitud formal para una nueva inspección ni para reabrir sus puertas.
La tragedia ocurrida el 21 de febrero aún permanece en la memoria colectiva. Esa noche, cerca de las 20:45 horas, parte del techo del patio de comidas colapsó, dejando seis fallecidos y más de 80 heridos, entre ellos menores de edad. La estructura afectada cubría unos 700 metros cuadrados y se desplomó mientras decenas de personas cenaban o transitaban por la zona. El impacto provocó caos, gritos y una movilización inmediata de bomberos y personal médico, que trabajaron bajo gran presión para rescatar a los atrapados.
El cierre del establecimiento fue una consecuencia inmediata. El Ministerio Público incautó la documentación vinculada al centro comercial y abrió una investigación para determinar responsabilidades. Los informes preliminares apuntan a que la acumulación de agua en el techo, producto de un deficiente sistema de drenaje, habría generado el colapso. También se mencionan fallas de mantenimiento y la ausencia de refuerzos estructurales desde su construcción en 2016.
En ese contexto, la decisión de encender las luces de la fachada encendió también la discusión pública. Para algunos vecinos, el gesto fue interpretado como una señal de reactivación; para las autoridades locales, un malentendido que debía ser aclarado.
La posición del alcalde provincial

El alcalde de Trujillo, en conferencia de prensa, negó cualquier vínculo entre el encendido de luces y la reapertura del local. “Descartamos que hayan solicitado una nueva inspección. Por ahora encendieron luces en su frontis, a pedido de los vecinos, por un tema de seguridad”, explicó.
La autoridad edil precisó que la municipalidad no ha recibido comunicación formal de los representantes del centro comercial para coordinar una revisión técnica. “Al día siguiente del hecho trágico, el Ministerio Público incautó toda la documentación relacionada con el establecimiento. Hemos solicitado copia y, una vez que nos la entreguen, procederemos a revocar el certificado de Inspección Técnica de Seguridad en Edificaciones (ITSE)”, señaló.
El burgomaestre también recalcó que cualquier proceso de reapertura implicará nuevos controles rigurosos. “Para que exista una posibilidad de reapertura, ellos tendrán que solicitar un nuevo ITSE y debemos tener la seguridad de que todas las instalaciones estén en buen estado. Convocaremos a colegios profesionales y al Ministerio Público para una inspección más transparente”, aseguró.
La semana pasada, un homicidio en la zona del Real Plaza encendió la alarma de los residentes cercanos. Frente a ese hecho, los vecinos presentaron un memorial a la municipalidad exigiendo mayor seguridad e iluminación en las calles aledañas.
“Nos reunimos para hablar específicamente sobre ese tema”, comentó el alcalde. En su versión, fueron los propios ciudadanos quienes habrían solicitado a la administración del centro comercial que encendiera las luces exteriores, como medida preventiva. “Son los vecinos los que, al parecer, se contactaron con el Real Plaza. Esa reunión es ajena a la municipalidad”, subrayó.
La autoridad local mostró su molestia con la difusión de versiones no confirmadas en medios y redes sociales. “Lamentamos que se publiquen o posteen cosas sin antes preguntar o confirmar”, manifestó, aludiendo a la especulación sobre una inminente reapertura.
Medidas para comerciantes afectados

El cierre del centro comercial impactó también a comerciantes y trabajadores que dependían de sus actividades. En respuesta, la municipalidad mantiene diálogo con este sector. “Vamos a volver a reunirnos este jueves, a las siete de la noche, frente al Real Plaza, con los comerciantes y propietarios, para ver cómo podemos ayudarlos a reactivarse”, adelantó el alcalde.
Dentro de las propuestas planteadas estuvo la posibilidad de trasladar temporalmente los negocios al óvalo Víctor Raúl Haya de la Torre. Sin embargo, los comerciantes no aceptaron. “Hemos planteado una alternativa ir temporalmente al óvalo, pero descartaron esa propuesta y pidieron que se fortalezca la seguridad en su zona”, afirmó la autoridad.
El proceso judicial sigue en manos del Ministerio Público, que continúa reuniendo pruebas sobre lo ocurrido el 21 de febrero. El domo del techo que cedió permanece en el lugar como evidencia clave, mientras se aguarda la conclusión de los peritajes técnicos.
El caso abrió un debate más amplio sobre la seguridad de las infraestructuras comerciales en el país. Expertos en ingeniería civil han advertido que la falta de mantenimiento, combinada con fenómenos climáticos intensos, eleva el riesgo de fallas estructurales en construcciones similares.
La ciudadanía espera que las indagaciones definan responsabilidades y que las autoridades establezcan controles más estrictos antes de permitir que espacios de alta concurrencia como el Real Plaza vuelvan a abrir sus puertas.



