
En una operación que reconfigura el mapa del sector de combustibles en la región andina, el Grupo Romero vendió el 80 % de su subsidiaria Primax a UNO Corp, conglomerado hondureño con presencia en varios países de América Latina.
El acuerdo de compra, firmado hoy, otorga a la firma centroamericana el control mayoritario de una de las redes de estaciones de servicio más importantes de Perú, Ecuador y Colombia.
Según informó Semana Económica, la transacción abarca las operaciones de Primax en los tres países donde está presente. Esto significa que UNO Corp asumirá el control de la totalidad de la red operativa de la marca, incorporando a su portafolio cientos de estaciones de servicio y centros de distribución.

Estructura accionaria
A pesar de la venta mayoritaria, el Grupo Romero conservará el 20 % de las acciones de Primax, lo que le permitirá mantener una participación minoritaria y estratégica en el negocio. La compañía peruana, con presencia en diversos sectores de la economía, busca así concentrarse en otras líneas de inversión sin desvincularse por completo del mercado de combustibles.
El comprador, UNO Corp, es uno de los conglomerados energéticos más importantes de Centroamérica. Con operaciones sólidas en países como Honduras, Guatemala, El Salvador y Colombia, la compañía ha construido una posición dominante en la distribución y comercialización de combustibles, así como en la gestión de estaciones de servicio bajo distintas marcas.

Expansión en Sudamérica
Según informó RPP, el traspaso de acciones fue el resultado de un “largo proceso” de evaluación y acuerdos, que finalmente culminó con la firma del contrato, lo que muestra el interés de empresas extranjeras en fortalecer su presencia en mercados estratégicos de Sudamérica.
La adquisición de Primax representa para UNO Corp un movimiento clave para consolidar su expansión en la región andina. Con esta compra, la compañía refuerza su presencia en tres economías relevantes y diversifica su portafolio de activos en el continente, posicionándose como un competidor de peso en el sector de combustibles.

Primax compró cuatro estaciones de Terpel
El pasado 30 de julio, el Instituto Nacional de Defensa de la Competencia y de la Protección de la Propiedad Intelectual (Indecopi) aprobó la adquisición de estaciones de servicio de Terpel por parte de Primax, compañía vinculada al Grupo Romero. La autorización se otorgó con condiciones específicas para prevenir efectos negativos en el mercado minorista de combustibles, en especial en las zonas donde la operación podría generar una concentración excesiva de oferta.
La decisión fue tomada por la Comisión de Defensa de la Libre Competencia (CLC), que evaluó el impacto potencial de la transacción. El organismo determinó que, aunque la compra puede concretarse, debe implementarse un conjunto de medidas correctivas orientadas a preservar un entorno competitivo.
Primax no podrá operar en cuatro estaciones de Lima
El Indecopi dispuso que Primax desinvierta en cuatro estaciones de servicio ubicadas en Chorrillos, San Miguel, Rímac y Comas, como condición para aprobar la compra de locales de Terpel. La venta incluirá edificaciones, instalaciones, bienes muebles, tiendas de conveniencia, equipos, dispensadores, títulos habilitantes y todos los activos necesarios para que un nuevo competidor pueda operar en igualdad de condiciones.
La medida responde a la identificación de un riesgo de concentración significativa en el mercado minorista de combustibles en estas zonas de Lima. Según el organismo, la operación, sin estas condiciones, podría favorecer un incremento de precios o afectar negativamente otras variables competitivas debido a la limitada cantidad de empresas con capacidad de rivalizar con Primax.

Además, se estableció que Primax no podrá adquirir, arrendar, abanderar o suministrar combustible a nivel mayorista de manera exclusiva durante un plazo de 10 años. El cumplimiento de estas condiciones será supervisado por un oficial de cumplimiento designado por Indecopi. Estas medidas, según la entidad, buscan mantener sustancialmente las condiciones de competencia previas a la transacción.



