Eva Ayllón atraviesa momentos complejos en el plano personal y familiar. En una entrevista concedida a Magaly Medina, la artista reveló detalles inéditos sobre la relación con sus hijos y las tensiones que han afectado la dinámica de la familia en los últimos meses, especialmente tras la denuncia de su hijo Francisco García Ayllón contra Natalia Málaga, reconocida deportista y expareja sentimental de la cantante.
Ayllón explicó que la controversia legal emprendida por Francisco rompió el lazo fraterno con su otro hijo, Carlos. Según sus declaraciones, ambos hermanos se encuentran distanciados.
“Él (Carlos) está muy molesto con su hermano. Obviamente están distanciados. No fue invitado a la boda tampoco. Y está de mi lado, pero nuestra vida sigue igual”, contó Eva, haciendo hincapié en que la situación familiar no ha mejorado tras los últimos acontecimientos.
El distanciamiento entre los hermanos no solo obedece a las diferencias surgidas por la denuncia, sino también a la manera en la que cada uno ha elegido afrontar el conflicto y tomar postura frente a la situación familiar.
Esta distancia ha dejado a Eva Ayllón en una posición vulnerable, intentando mantener la armonía familiar al tiempo que enfrenta las consecuencias emocionales de los conflictos internos y públicos.

Eva Ayllón expresa su malestar por la actitud de su hermana Rosa
Otro capítulo complejo en la vida familiar de Eva Ayllón involucra a su hermana Rosa. La cantante manifestó abiertamente su malestar tras saber que Rosa asistió a la boda de Francisco, su hijo, y le dio la mano a su expareja, Francisco García Bazán.
Pero lo que más le dolió fue que Rosa fue quien acompañó a Francisco al altar en una fecha clave para la familia.
Sin rodeos, Eva reconoció el distanciamiento con su hermana: “No tengo relación con ella. Yo soy la molesta con ella porque hay cosas que no debieron pasar porque si yo te quiero como una hermana, eres mi todo, luz y noche, yo respeto tus necesidades emocionales. Y sabiendo yo todo lo que has vivido, no podría ir donde el enemigo a darle la mano sabiendo que te ha hecho tanto daño”, declaró Ayllón.
Al ser consultada sobre cómo se sintió al enterarse de que Rosa estuvo en la boda con quien considera una figura conflictiva de su pasado, la artista fue clara: “Me siento mal y decepcionada, pero es parte de la vida”.
El testimonio de Eva revela la hondura de los sentimientos enfrentados que la rodean y el dolor que experimenta ante lo que percibe como una traición o falta de solidaridad de su entorno más cercano.

Eva responde a quienes la critican por elegir amistad sobre lazos familiares
En medio de la controversia, parte del público ha interpretado que Eva Ayllón optó por apoyar a Natalia Málaga sobre su hijo Francisco.
La cantante, sin embargo, ofreció una respuesta directa ante esa percepción: “Yo tengo un hijo que se ha portado mal conmigo y tengo una amiga que trabaja conmigo y con la que no tengo ningún problema”.
Ayllón aclaró que su vínculo con Natalia Málaga se sostiene en el tiempo y que, tras varios años de colaboración profesional y cercanía, no existe ningún conflicto con la exvoleibolista.
En contraste, el comportamiento de Francisco durante los últimos meses ha implicado, según sus palabras, ofensas y decisiones que la han herido profundamente no solo como madre, sino también como mujer.
La artista concluyó la entrevista mostrando esperanza en que el tiempo ayude a recomponer los lazos rotos, pero enfatizó que mientras su hijo no tome conciencia del daño causado, mantendrá la distancia necesaria para proteger su bienestar emocional.
“No lo crie de esa forma. Sé que todo puede mejorar cuando él empiece pidiendo disculpas. Para mí es decepcionante, estuve deprimida, pero ya no lo estoy”, finalizó.
La situación de Eva Ayllón pone en primer plano los desafíos de la vida familiar y la relevancia de los vínculos afectivos, incluso para figuras públicas que se enfrentan no solo a sus conflictos personales, sino al escrutinio constante de la opinión pública y la prensa.
