Periodista Manuela Camacho cuestiona al Estado por acosador Hialmar Laynes: “Tuvimos que hacer el trabajo que ustedes no hicieron”

La comunicadora denunció que las autoridades minimizaron las amenazas desde el inicio, ignoraron sus pedidos y permitieron la fuga del agresor. Asegura que su captura fue posible por el esfuerzo de las víctimas y no por la acción del Estado

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Durante casi un año, las víctimas de acoso digital impulsaron una denuncia penal sin respuestas efectivas por parte del sistema judicial ni de la Policía. X: PNP

Durante casi un año, el nombre de Hialmar Enrique Laynes Sánchez, denunciado por acosar, amenazar y extorsionar a varias periodistas peruanas, figuró como prófugo en los registros del Ministerio del Interior. Su rostro apareció en el Programa de Recompensas, pero su detención no se concretaba. Hasta ahora. En las últimas horas, la Policía Nacional lo ubicó y trasladó a la comisaría Laura Caller, tras una orden de 18 meses de prisión preventiva dictada por la Segunda Fiscalía Penal Supraprovincial Especializada en Derechos Humanos.

Para Manuela Camacho, una de las periodistas denunciantes, esta captura no es una victoria institucional, sino el resultado de una lucha sostenida por las víctimas. En un extenso comunicado, fue tajante: “Este es un logro de nosotras, las víctimas del acosador, que seguimos adelante pese a las trabas que ustedes y todo el aparato estatal nos impusieron”. Entre las afectadas también están Trilce Reyes, Ximena Carrasco y María Fernanda Montenegro.

Según relata, fue un proceso marcado por la inacción de las autoridades. “Su captura se dio porque invertimos recursos, tiempo y esfuerzo en hacer el trabajo que ustedes no hicieron”, escribió en referencia a las múltiples gestiones que realizaron para que se incluya a Laynes en la lista de los más buscados.

“La policía minimizó nuestras denuncias desde un inicio”

Manuela Camacho evalúa abandonar el
Manuela Camacho evalúa abandonar el país.

Camacho recordó que en reiteradas ocasiones alertaron sobre el paradero del agresor y pidieron su intervención, sin obtener respuesta. “El Ministerio del Interior jamás contestó a nuestros pedidos por incluirlo en la lista de personas buscadas, la policía minimizó nuestras denuncias desde un inicio, permitieron que fugara cuando se suponía que custodiaban su casa, no investigaron a los policías que pidieron coima por detenerlo, no lo buscaron en todos estos 10 meses pese a que nosotras siempre insistimos en conocer su paradero”, denunció.

Incluso, contó que hace tan solo tres días intentaron concretar su detención, pero la respuesta fue que no contaba con requisitoria en el sistema, y que no tenían patrulleros disponibles. “Que finalmente nos escucharan para ir a efectuar la detención (lo que simplemente les corresponde) cuando nosotras hicimos todo el trabajo previo, no es algo de lo que enorgullecerse”, enfatizó.

La jueza y las represalias institucionales

A lo largo del proceso, las periodistas también enfrentaron represalias institucionales. Camacho denunció que fue notificada con una carta notarial enviada por la jueza Emma Tambini Monge, quien previamente había emitido una sentencia de prisión suspendida contra Laynes. En la misiva, la magistrada alegaba una supuesta afectación a su honra por los cuestionamientos públicos al fallo.

| Fotocomposición / captura
| Fotocomposición / captura

No obstante, días después, la misma jueza presentó una denuncia formal contra Laynes por amenazas dirigidas a ella y a su familia, lo que evidenció —según Camacho— el nivel de peligro al que estuvieron expuestas desde el inicio del caso, sin que eso movilizara a las instituciones para actuar con firmeza.

Dolor, miedo y una batalla que no termina

La comunicadora señaló que muchas de las afectadas optaron por guardar silencio en lo público, mientras intentaban reconstruir su vida con miedo e incertidumbre. A lo largo del año, recibieron amenazas constantes, enfrentaron hostilidad en redes sociales y se encontraron con un entorno que no siempre les creyó.

Pese a ese escenario adverso, un grupo de siete periodistas decidió llevar el caso por la vía penal, con la esperanza de que no quedara impune. Si bien la reciente captura representa un avance, Manuela fue enfática al señalar que el proceso recién empieza: el objetivo ahora es que el agresor reciba una condena ejemplar que marque un precedente contra el acoso sistemático en el entorno digital y mediático.

Composición: Infobae Perú
Composición: Infobae Perú

¿Dónde pedir ayuda si sufres violencia?

1. Línea 100:Si estás enfrentando situaciones de violencia —ya sea por razones de género o dentro del entorno familiar— puedes comunicarte gratuitamente con la Línea 100. Este servicio del Estado ofrece información, orientación legal, consejería y apoyo emocional, y lo hace en castellano, quechua y aimara, para garantizar el acceso de todas las personas afectadas, sin importar su idioma. Está disponible las 24 horas del día, los 7 días de la semana, y puedes llamar desde un teléfono fijo o celular.

2. Centros Emergencia Mujer (CEM):Otra opción es acudir a un Centro Emergencia Mujer, espacios diseñados para brindar atención especializada e integral a víctimas de violencia. Estos centros cuentan con equipos multidisciplinarios que ofrecen:

  • Asesoría legal
  • Apoyo psicológico
  • Acompañamiento social

Los CEM atienden de lunes a viernes, de 8:00 a. m. a 4:15 p. m., en todo el país. Además, aquellos que se encuentran dentro de comisarías están disponibles las 24 horas, todos los días del año. Para saber cuál es el más cercano o pedir más detalles, puedes llamar al (01) 419 7260.