
Tras más de 12 horas de audiencia, el exfutbolista Omar Bravo, ídolo histórico de las Chivas de Guadalajara, fue vinculado a proceso por el presunto delito de abuso sexual infantil agravado, y deberá permanecer en prisión preventiva oficiosa durante seis meses, según determinó un juez de control en Jalisco.
La decisión fue celebrada por José Juan Soltero, abogado de la presunta víctima menor de edad, quien consideró que la resolución representa un avance importante en la búsqueda de justicia.
“Indudablemente que hoy se hizo justicia. La prisión preventiva oficiosa es obligatoria en este tipo de delitos por su gravedad. La Constitución prevé estas medidas, y puede ampliarse hasta por dos años si el caso lo amerita”, expresó Soltero a la salida del juzgado.

Durante la audiencia, celebrada el viernes 10 de octubre, la Fiscalía del Estado de Jalisco presentó diversos elementos probatorios que convencieron al juez de dictar la vinculación a proceso. La defensa de Bravo solicitó medidas menos restrictivas, pero el juzgador determinó que, por la naturaleza del delito, era necesario mantener la medida de prisión preventiva.
Soltero destacó que esta resolución envía un mensaje importante en favor de las víctimas y contra la impunidad en casos de abuso sexual infantil.
“No existe posibilidad de que salga sin antes enfrentar un juicio. Tiene derecho a recurrir la vinculación, pero la ley es clara: este tipo de conductas deben enfrentarse con responsabilidad y sin privilegios”, agregó el abogado.

Por su parte, Leobardo Treviño, representante legal de Omar Bravo, lamentó la decisión y sostuvo que la notoriedad del exjugador influyó negativamente.
“El hecho de que Omar sea una figura pública nos jugó en contra. En otros casos similares se concede la suspensión, pero aquí fue diferente”, argumentó.
Treviño también aseguró que su cliente se encuentra “triste y apenado” por la situación, pero confía en que su inocencia será demostrada durante el proceso judicial.
La audiencia se llevó a cabo en los juzgados de Puente Grande, Jalisco, donde el juez determinó un plazo de investigación complementaria antes de que el caso avance a juicio.
Omar Bravo, de 44 años, considerado uno de los máximos goleadores en la historia del Club Guadalajara, ahora enfrenta un proceso penal que podría extenderse hasta por dos años. Mientras tanto, el abogado Soltero reiteró su compromiso de acompañar a la víctima y su familia durante todo el proceso, insistiendo en que “este es solo el primer paso para garantizar justicia plena”.
“Este caso demuestra que, sin importar quién sea el acusado, la justicia puede prevalecer cuando se trabaja con verdad y determinación”, concluyó el abogado de la víctima.